¿Dan realmente los filtros de aire de alto rendimiento más prestaciones? Hagamos un experimento…

El tuning es algo que nunca pasará de moda y, entre los accesorios más populares a la hora de “maquear” nuestro vehículo, no pueden faltar las llantas, los alerones descomunales o el tubo de escape. Este último es una pieza clave no sólo en los coches preparados por especialistas del mercado de accesorios, sino también en vehículos de alto rendimiento de producción que buscan extraer un sonido más suculento de su mecánica.

Hace tiempo traté de responder a la pregunta de si es posible sacarle unos caballos extra al motor cambiando el tubo de escape y hoy quiero ir un poco más allá para referirme a los filtros de aire de alto rendimiento. Recordemos que, en su día, mi compañero Luis también os contó todos los secretos del filtro de aire.

Hablamos de un elemento mucho más importante de lo que puedas creer y que, además, es fácil de mantener, fácil de cambiar y relativamente barato. Más allá de los filtros de aire tradicionales, en las tiendas de componentes probablemente te hayas topado alguna vez con filtros de aire que prometen más potencia y par que los de fábrica.

Ahora bien, ¿los filtros de aire de alto rendimiento son una estafa o realmente nos dan más potencia?

A priori, es difícil creer que los filtros de aire puedan producir un beneficio adicional en términos de rendimiento, dado que son tan fáciles de obtener e instalar, pero lo cierto es que nuestro amigo Jason Fenske, de Engineering Explained, nos ha sorprendido con un nuevo vídeo en el que demuestra que, efectivamente, los filtros de aire de alto rendimiento producen más potencia, aunque esta sea limitada.

Esto quiere decir que, probablemente, en una conducción real no aprecies esta diferencia de potencia, pero al menos podrás dormir tranquilo sabiendo que en la tienda no te han tomado el pelo. Como en los enlaces anteriores podéis encontrar absolutamente todos los detalles acerca de los filtros de aire, vamos a dejar de lado estas explicaciones para centrarnos en el experimento, probado en una situación real con cuatro tipos de filtros de aire.

Los filtros de aire suelen estar compuestos de fibras naturales o sintéticas que, con el paso del tiempo, se ensucian y obstruyen. Eso sí, en España los filtros de aire de alto rendimiento triplican el precio de un filtro convencional.

Para ello, Fenske utiliza su Subaru XV personal, un modelo generalista que podemos encontrar en nuestro mercado. Para el experimento, se sirve de cuatro filtros de aire:

• El que tenía instalado en el vehículo, ya sucio.
• Un filtro de aire nuevo del fabricante.
• Un filtro de aire premium de postventa más barato.
• Un filtro de aire de alto rendimiento de la marca K&N, que anuncia un aumento de potencia de 4 CV y casi 7 Nm de par.

Todo comienza en el banco de potencia, donde se mide la potencia y el par del vehículo para ver las diferencias entre los diversos filtros. Los datos obtenidos apuntan a que los filtros de aire de postventa ofrecen una potencia de 3,2 caballos superior respecto a los filtros nuevos del fabricante (1,8 CV extra) y, por supuesto, mayores a los del filtro de aire usado.

La mayor ganancia en prestaciones se produce con el filtro de aire de alto rendimiento, con una mejora de 4,3 caballos, al tiempo que las cifras de par también se incrementan proporcionalmente en cada caso. Posteriormente y, a través de una VBox, Fenske hace la prueba en carretera abierta, midiendo el tiempo en el que el Subaru XV acelera de 32 a 96 km/h y de 72 a 96 km/h (con el vehículo siempre en la misma marcha).

Los resultados son los siguientes:

Esto se debe esencialmente a que tanto el filtro de aire usado como el filtro del fabricante dejan pasar una menor cantidad de aire a las cámaras de combustión, el primero de ellos por estar semi obstruido y, el segundo, por ser más restrictivo que los filtros de aire de empresas de componentes de postventa, los cuales permiten obtener unas cifras de prestaciones ligeramente superiores.