Viajar a bordo del Mercedes-Benz Clase V es un lujo, y lo es por muchas razones. Si hay algo que siempre ha diferenciado al MPV de la estrella son su espacio interior, su tecnología y su amplia dotación, tanto de serie como opcional. Es cierto que el segmento no pasa por su mejor momento, pero este Mercedes-Benz V 300 d Avantgarde es soberbio.
La oferta del Mercedes-Benz Clase V incluye tres longitudes de carrocería (compacta, larga y extralarga) y una gama mecánica de lo más completa. Tienes opciones diésel, gasolina micro-híbridas y versiones eléctricas. Todas ellas son automáticas, y puedes elegir entre tracción al eje trasero o total, según versiones. Un híbrido-enchufable ya sería de 10.
En el segundo lavado de cara de esta generación (2014), llevado a cabo en 2024, se renovaron profundamente el diseño exterior e interior, el equipamiento de serie y opcional; y los asistentes a la conducción. Gracias a ello, es más atractivo, está todavía mejor acabado y ofrece a sus pasajeros un confort y seguridad referentes en el segmento.
Son rivales del Mercedes-Benz Clase V modelos como los Ford Tourneo Custom, Volkswagen Multivan, Peugeot Traveller, Renault Traffic, Hyundai Staria, Lexus LM, Citroën SpaceTourer, Fiat Ulysse, Opel Zafira, Voyah Dream y Toyota Proace Verso, entre otros. Por precio, es de las alternativas más caras, solo superada por el Lexus y el Voyah.
Diseño y calidad
El renovado Mercedes-Benz Clase V cambia especialmente en el frontal. Vemos un nuevo paragolpes y unos faros remozados con tecnología LED de serie o matricial en opción. A ello se suma una parrilla de nueva factura cuyo patrón varía según el acabado elegido. En algunos de ellos, puede estar retroiluminada mediante una tira de ledes.
Para los detalles, se combinan los cromados y el negro brillante. Como es habitual, los paquetes Night y AMG le dan un toque más deportivo al conjunto. Varían detalles como las tomas de aire, los paragolpes y las llantas de aleación. Hay nuevos diseños en tamaños de entre 17 y 19 pulgadas. Para el exterior hay 12 colores, algunos de ellos nuevos.
En esta unidad vemos el Rojo Jacinto metalizado. La superficie acristalada, como buen MPV, es muy amplia, favoreciendo la visibilidad. Cabe destacar que tenemos puertas correderas a ambos lados y estas pueden tener funcionamiento eléctrico. Ya en la zaga, se han oscurecido ligeramente los pilotos y la luna trasera es practicable.
Se puede pedir en tres longitudes para la carrocería: Compacta (4,90 metros), Larga (5,14 metros) y Extralarga (5,37 metros). Para la prueba, hemos elegido la Larga. Esta alternativa cumple, a nuestro parecer, con las necesidades de la mayoría de las familias, salvo que se necesite un extra de maletero o se le vaya a dar otro uso, como taxi.
El habitáculo del Mercedes-Benz Clase V también recibe interesantes novedades. Vemos un diseño completamente nuevo para el salpicadero y el volante, dos pantallas de 12,3 pulgadas para la instrumentación y el sistema multimedia; una nueva ubicación de las salidas de aire centrales y mandos remozados para controlar el MBUX. En conjunto, transmite más calidad.
Si bien el nivel de lujo no alcanza el de los turismos de la marca, hay una considerable presencia de materiales blandos. Estos se pueden incrementar de manera opcional, con tapizados de cuero de primera calidad. Lógicamente, no faltan los plásticos rígidos en múltiples elementos, aunque tienen buen tacto y aspecto, con ajustes aparentemente sólidos.
El ambiente es premium y tecnológico, sumando adicionalmente un sistema de iluminación ambiental más sofisticado. En calidad, se sitúa claramente por delante de la práctica totalidad de sus rivales. Solo el Lexus LM está todavía más cuidado, aportando un nivel de lujo más parecido a turismos y SUV. En ‘equipamiento’ tienes más detalles.
Un aspecto que nos gusta es que la marca haya dejado fuera los controles esenciales de ciertas funciones, como el climatizador. Las pantallas, por su parte, tienen excelente calidad, funcionamiento y resolución, siendo de las mejores del mercado. El MBUX es un sistema intuitivo y de tremenda calidad, ofreciendo múltiples posibilidades de personalización.
El control por voz de Mercedes-Benz es, sin duda, el mejor del mercado.
Habitabilidad y maletero
La habitabilidad es soberbia en el Mercedes-Benz Clase V, con una amplia modularidad de los asientos. Estos pueden deslizarse, abatirse y extraerse, aunque debes tener en cuenta que su peso es considerable. Los asientos delanteros también pueden ser giratorios en opción y, los cinturones delanteros, tienen ajuste en altura.
La postura de conducción es claramente más vertical que en un turismo o SUV, pero menos que en sus rivales. Esto nos permite ir más estirados y, con ello, cómodos al volante. Encontrar la postura de conducción es sencilla por los múltiples ajustes de volante y asientos. Estos últimos son, además, muy cómodos por mullido, con un agarre correcto.
El interior puede configurarse con seis, siete u ocho plazas individuales.
Pueden tener muchas funcionalidades. De hecho, uno de los aspectos en los que más brilla el Mercedes-Benz Clase V frente a sus rivales es en las comodidades que permite ofrecer a los pasajeros en todas las plazas. Los más lujosos pueden equipar elementos como ajustes eléctricos, calefacción, ventilación y respaldos reclinables, entre otros, en las filas de asientos posteriores.
En ellas también hay buenos acabados, salidas de ventilación, altavoces, ISOFIX, reposabrazos, posavasos, asideros, posibilidad de pedir una consola central… A ello se unen abundantes huecos portaobjetos de buen tamaño, especialmente en la primera fila de asientos. Como os decíamos, todo lo necesario para viajar desahogado y en business.
El borde de carga queda a 530 mm del suelo.
Respecto al espacio de carga, este varía en función de la carrocería elegida y la configuración de asientos. Hablamos de un mínimo de 610 litros en la Compacta; 1.030 litros en la Larga; y 1.410 litros en la Extralarga. El portón puede ser eléctrico, una función muy recomendable por su tamaño y peso; al tiempo que la luneta es practicable de serie.
Motorización Mercedes-Benz Clase V 300 d
El Mercedes-Benz Clase V brinda un amplio abanico de mecánicas, aunque sin híbridos enchufables. En la EQV se ofrecen dos tamaños de batería –300 con 90 kWh y 250 con 60 kWh-. La potencia es de 204 CV (150 kW) y la autonomía eléctrica de hasta 365 km. Se puede recargar con corriente alterna (CA) hasta 11 kW y con corriente continua (CC) hasta 110 kW.
Por otra parte, el conocido y eficiente motor diésel OM654 está disponible en tres niveles de potencia: 220 d (163 CV/120 kW), 250 d (190 CV/140 kW), 300 d (237 CV/174 kW). A ellos se suma un nuevo motor de gasolina, el M254. Se ofrece con tecnología micro-híbrida de 48V en la versión V 300. Desarrolla 231 CV (170 kW) de potencia.
Para la prueba hemos elegido la propuesta diésel más potente, que brinda una relación potencia/consumos muy interesante. Con sus cifras, es capaz de ofrecer una aceleración contundente y una buena reserva de potencia para realizar adelantamientos ágiles. Asimismo, sostiene sin esfuerzo velocidades de crucero elevadas.
No te pega al asiento, pero completa el 0 a 100 km/h en 7,4 segundos, un dato muy bueno para su tamaño y peso. La recuperación de 80 a 120 km/h requiere 5,6 segundos y la velocidad máxima es de 220 km/h. Además, asociado a la transmisión automática 9G-TRONIC, el conjunto resulta elástico y muy cómodo para el día a día.
Esta caja, de serie en todas las versiones, tiene unas transiciones muy suaves, aunque no destaca en rapidez. Tampoco es que sea algo necesario dada la concepción del vehículo. Para un uso normal, nos parece una excelente combinación. Asimismo, tenemos dos modos de conducción que nos permiten variar diversos parámetros del vehículo.
Se denominan Normal y Sport y, a nivel práctico, las diferencias entre ellos no son especialmente marcadas. Sí que es cierto que en Sport tenemos una respuesta algo más rápida al acelerador, pero poco más. La tracción es trasera de serie, aunque puedes optar por la tracción total en los diésel. Los modelos eléctricos tienen siempre tracción delantera.
Es posible que, muchos usuarios que practican una conducción tranquila, tengan más que cubiertas sus necesidades con la versión 250 d; o incluso con el 220 d si se apuesta por la carrocería Compacta. Nuestra recomendación es analizar bien tu caso concreto, ya que la diferencia de precio entre ellas es notable. Por refinamiento, son idénticas.
Si bien no se trata de un conjunto tan suave como el de los SUV o turismos de la marca, la rumorosidad y vibraciones quedan bien disimuladas. Sobre todo, en el interior, ya que Mercedes-Benz ha mejorado el aislamiento del conjunto. Únicamente en aceleraciones intensas el sonido es más notorio, pero en ningún caso resulta molesto.
Por último y, respecto a los consumos, la compañía homologa un combinado WLTP de 7,3 l/100 km. Tras la semana de pruebas, hemos logrado un combinado real de 8,1 l/100 km, una cifra razonable. En entornos urbanos ronda los 10 l/100 km siendo cuidadosos; mientras que en autopista logramos una media en viaje de 6,7 l/100 km.
Comportamiento Mercedes-Benz Clase V 300 d
El Mercedes-Benz Clase V sobresale en el segmento de las MPV por calidad de rodadura y aislamiento del exterior; a lo que hemos de sumar un equipamiento de ADAS, seguridad y confort de primer orden. Gracias a ello, es junto con el Lexus LM la mejor alternativa para recorrer kilómetros, sobre todo, con la suspensión neumática Airmatic.
Si pasas muchas horas al volante, es un extra totalmente recomendable, aunque caro. Junto con el tren de rodaje Agility Control de serie, el resultado es un vehículo que filtra muy bien las imperfecciones del asfalto y, a la vez, contiene de manera tremendamente eficaz (para el tipo de vehículo que es, claro) los balanceos en tramos de curvas.
Con esta configuración, no existe un MPV en el mercado que alcance mejor compromiso entre agilidad y comodidad. La suspensión de serie, por su parte, es algo blanda en su conjunto y ligeramente rebotona en el eje trasero en los movimientos rápidos de las ruedas. Por ejemplo, resaltos urbanos. La deportiva AMG, en cambio, apuesta por la firmeza.
Sin ser especialmente seca en los baches más marcados, no es tan cómoda en su conjunto como la de serie o la neumática en un amplio abanico de situaciones. Puede ser interesante, por ejemplo, para aquellos que suelan enfrentarse habitualmente a tramos de curvas y acostumbren a rodar por vías rápidas y/o bien asfaltadas. La neumática es la más polivalente.
Respecto a la dirección, se ha cuidado que la sensación que transmita no sea la de un vehículo comercial. Es cierto que no brilla por rapidez, precisión o retorno de información frente a un SUV y turismo. Sin embargo, sí que nos parece que se asemeja más a la de estos que la de rivales derivados de comerciales ligeros, como los de Stellantis.
En una conducción normal e incluso aumentando ligeramente el ritmo, nos permite circular con gran sensación de estabilidad y seguridad. En todo momento se tiene la sensación de llevar el control, con reacciones naturales y eficaces de los ADAS cuando te pasas con el gas. Eso sí, recuerda que la física es la física y es un coche alto y pesado.
En la ciudad, la mejora en cámaras, radares y asistentes nos permite movernos con mayor facilidad que antes. La visibilidad es buena en el segmento, pero, al fin y al cabo, llevamos un coche grande. A mayor longitud, lógicamente, irán apareciendo mayores complicaciones, un hándicap de los MPV. El diámetro de giro también es bueno frente a sus rivales.
Respecto a la tracción total, está enfocada principalmente a mejorar la estabilidad y la tracción, no a salir del asfalto. Ni la altura libre ni los neumáticos están pensados para ello. Sin embargo, sí que puede sacarte de un apuro en zonas con algo de barro, hielo o nieve, ya sea por motivos profesionales, porque vives en zonas frías o porque vais a esquiar en familia.
Lo menos convincente del Mercedes-Benz Clase V es el tacto de los frenos. Además, es algo que no ha mejorado con las diversas actualizaciones de esta generación. Son eficaces, pero el tacto es poco preciso y requiere de un período de adaptación para no quedarnos cortos de frenada. En muchas ocasiones requiere hundir con contundencia el pie en el pedal.
Equipamiento
El Mercedes-Benz Clase V se ofrece en España con los acabados base, Style, Avantgarde, Marco Polo (camper) y Exclusive. Desde el más sencillo ya incluye múltiples airbags, aire acondicionado delantero, asientos delanteros con ajuste de altura, reposabrazos, freno de mano eléctrico, limpiaparabrisas y luces automáticos, lunas tintadas…
También de serie encontramos toma 12V en el maletero, tapicería de tela, volante de cuero, cuadro de instrumentos digital, dos puertas deslizantes, asientos traseros (2ª y 3ª fila) abatibles, deslizables y extraíbles; rueda de repuesto, servicios remotos, todos los asientos individuales, paragolpes y molduras en color de la carrocería y volante ajustable en altura y profundidad, entre otros.
Respecto al equipo multimedia táctil de 12,3 pulgadas con MBUX, cuenta con 8 altavoces, Bluetooth, USB, control por voz, radio digital y servicios conectados. Los más completos o en opción añaden carga inalámbrica de smartphone, Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos, navegador y realidad aumentada para navegación.
En materia de ADAS podemos equipar sensores de aparcamiento perimetrales, alerta de ángulo muerto, aviso de tráfico cruzado trasero, cámara trasera o 360º, asistente activo de distancia Distronic, alerta y asistente de cambio involuntario de carril, detector de fatiga, PRE-SAFE, reconocimiento de señales de tráfico, control de crucero adaptativo, asistente de luz de carretera… La mayoría de ellos son de serie.
La dotación opcional del Mercedes-Benz Clase V es tremendamente amplia. Algunos elementos destacados son el paquete AMG, equipo de sonido surround Burmester con 15 altavoces y 640 W, asiewntos calefactados, ventilados, giratorios y con memoria y masaje; suspensión neumática Airmatic, tapizado extendido de cuero, tapizados en cuero de primera calidad, portón trasero eléctrico…
Ficha técnica
Dimensiones y capacidades | |
Largo | 5.140 mm |
Ancho | 1.928 mm |
Alto | 1.880 mm |
Batalla | 3.200 mm |
Capacidad maletero | 1.030 litros |
Peso | 2.314 kilos |
Datos técnicos | |
Neumáticos delanteros | Goodyear Eagle F1 – 245/45 R18 100W |
Neumáticos traseros | Goodyear Eagle F1 – 245/45 R18 100W |
Suspensión delantera | McPherson |
Suspensión trasera | Eje rígido |
Barra estabilizadora | Ambos ejes |
Frenos delanteros | Discos ventilados |
Frenos traseros | Discos macizos |
Diámetro de giro entre paredes | 11,8 metros |
Datos mecánicos | |
Motor diésel | 4 cilindros en línea |
Cilindrada | 1.950 cm³ |
Potencia | 174 kW (237 CV) @ 4.200 rpm |
Par motor | 500 Nm @ 1.600 – 2.400 rpm |
Transmisión | Convertidor de par 9 velocidades |
Tracción | Trasera |
Aceleración (0-100 km/h) | 7,4 segundos |
Aceleración (80-120 km/h) | 5,6 segundos |
Revoluciones motor a 120 km/h | 2.100 rpm |
Vel. Máxima | 220 km/h |
Consumo WLTP combinado | 7,3 l/100 km |
Consumo real combinado | 8,1 l/100 km |
Emisiones CO2 | 194 g/km de CO2 |
Distintivo ambiental | C |
Capacidad depósito gasóleo | 70 litros |
Capacidad depósito AdBlue | 24 litros |
Seguridad y precio | |
Puntuación EuroNCAP | 5 estrellas de serie |
Precio mín (gama sin desc. /extras) | 74.150 euros |
Precio máx. (gama sin desc./extras) | 123.690 euros |
PVP unidad probada sin opcionales | 95.349 euros |
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8.2
Notable+
El Mercedes-Benz Clase V es todo un clásico entre los MPVs grandes y bien podríamos decir que se trata del referente del segmento. Tras el lavado de cara, combina una atractiva estética con un interior de calidad y muy tecnológico; una amplia oferta de mecánicas, soberbio espacio y un equipamiento opcional muy extenso (y caro). Todo ello con una calidad de rodadura ‘premium’ y un precio que supera a todos sus rivales.
Lo bueno
- Calidad interior, sofisticación y funcionamiento de las pantallas por encima de la práctica totalidad de sus rivales.
- Comodidades y modularidad que ofrece en todas las filas de asientos, con un espacio soberbio.
- Mecánica muy solvente con unos consumos racionales y poca rumorosidad.
- Aislamiento y calidad de rodadura en autopista.
- Buen comportamiento por la puesta a punto de chasis y suspensiones, aunque por desgracia, la física es la física.
Lo mejorable
- Su precio es su mayor hándicap, tanto de partida como de los opcionales.
- Equipamiento de serie mejorado, pero con ciertas lagunas en algunos acabados para el precio que tiene.
- Echamos en falta alguna alternativa híbrida enchufable.
- Muchos usuarios no necesitarán “tanta” potencia.
- Los asientos pesan mucho para andar ‘trasteando’ con ellos. La modularidad es muy buena, pero no resulta práctica por ese motivo.