La electrificación se ha apoderado de la octava generación del BMW Serie 5. A la nueva variante 100% eléctrica, el BMW i5, se suma un salvaje BMW M5 de altas prestaciones híbrido enchufable. Lo hemos probado en su versión familiar, el BMW M5 Touring, y os podemos adelantar que es una auténtica locura por prestaciones, peso y conducción.
Hablamos de un juguete con 727 CV, 1.000 Nm de par, más de dos toneladas de peso y tracción total. Todo ello en una envoltura realmente agresiva que se puede mejorar todavía más con las M Performance Parts. Como el resto de las versiones del Serie 5, se ofrece en carrocería berlina y familiar. Esta última no estuvo disponible en la anterior entrega.
Como ocurre en el resto de la gama, a un exterior que imprime mayor autoridad se suman en el nuevo BMW M5 Touring un interior muy cuidado y tecnológico, la gran influencia de la electrificación y las vanguardistas innovaciones en asistencia a la conducción, control/operación y conectividad. Además, aumentan ligeramente las cotas interiores.
Algunos de los rivales del BMW M5 Touring son los Porsche Panamera Turbo e-Hybrid, Mercedes-AMG GT 63 S E Performance 4 puertas Coupé, Mercedes-AMG E 53 Estate Hybrid 4MATIC, Audi RS 6 Avant Performance quattro o Porsche Taycan Sport Turismo, entre otros. El familiar bávaro está en una posición intermedia por precio, que no por potencia.
Diseño y calidad
El exterior del BMW M5 Touring se caracteriza por la deportividad y unas líneas limpias. Desde el primer vistazo resulta más agresivo que las versiones convencionales. Esto puede apreciarse en elementos como el paquete Shadow Line exterior, los afilados paragolpes, el marcado alerón, los musculosos hombros y llantas de aleación de hasta 21 pulgadas.
En el frontal destacan los faros Full LED adaptativos dobles y la parrilla activa en forma de riñón de BMW con contorno iluminado. Estos faros incluyen la iluminación adaptativa en curva, el asistente de luz de carretera con antideslumbramiento, tecnología Matrix y el cambio de luz automático. Gracias al paquete negro exterior van tintados.
En la vista lateral son protagonistas la elevada línea de los hombros, las superficies de poderoso diseño y dos líneas de carácter trazadas con precisión que le dan una forma muy atlética a la carrocería. Destacan en esta nueva generación los tiradores de las puertas enrasados, una superficie acristalada amplia y la toma de carga en el lado del conductor.
Para la carrocería se ofrecen un total de 10 pinturas estándar, más el catálogo casi infinito de BMW Individual. Por supuesto, tampoco falta el paquete exterior M de fibra de carbono opcional. En esta unidad podemos ver el M Marina Bay Blue metalizado. La poderosa zaga se caracteriza por unas luces traseras LED planas y un prominente difusor con cuatro colas de escape.
Sobre el techo podemos equipar un cristal panorámico practicable con cortinilla eléctrica.
Si pasamos al habitáculo, tenemos un conjunto extremadamente tecnológico y digital. Preside el salpicadero la nueva pantalla BMW Curved Display. Equipa el sistema operativo BMW ID 8.5 y la última generación del sistema de mando y control iDrive. Combina un cuadro de instrumentos de 12.3 pulgadas con un sistema multimedia de 14.9 pulgadas.
Ambos están situados detrás de una única superficie acristalada, reduciendo el número de botones. Por funcionamiento, gráficos, fluidez, respuesta táctil y nivel de personalización no admiten tacha. Incluso la calidad de las cámaras con funciones 3D es sobresaliente. Sin embargo, aglutina mucha información que no está del todo bien ordenada.
Requiere de un período de adaptación y aprendizaje quizá algo superior al de sus rivales. De serie también tenemos un generoso y completo Head-Up Display personalizable. Respecto a la calidad general, el BMW M5 Touring presume de materiales de primera. Lógicamente, pueden elegirse diversos tapizados y molduras.
Desde cuero hasta Alcantara, pasando por elementos en fibra de carbono. Estos se combinan con diversos plásticos rígidos de buen aspecto y tacto. Asimismo, la sensación de solidez y empaque es buena. Con todo y con eso, pese a ser muy vistoso, no tenemos del todo claro que haya una mejora en calidad y materiales real con respecto al anterior Serie 5.
La punta de lanza de la gama no solo ofrece una dotación muy completa. Encontramos diversos elementos más deportivos como el volante M con marca roja a las 12 y los botones de los modos personalizables; el botón de arranque en rojo y los cinturones con los colores M. Rematan el conjunto los acabados de cristal «CraftedClarity» en diversos componentes.
Por último, cabe destacar que la BMW Interaction Bar sirve como elemento decorativo luminoso, pero también para dar señales de aviso a los ocupantes. El panel de control de la consola central incluye superficies táctiles adicionales y un selector de marchas de nuevo diseño que nos hace echar de menos la clásica palanca de sus predecesores.
Habitabilidad y maletero
La nueva generación del Serie 5 Touring ha crecido en dimensiones y este BMW M5 Touring se beneficia de ello en su habitáculo. Hay más huecos portaobjetos -de un tamaño normal- y también más espacio para los ocupantes en ambas filas. Además, los asientos deportivos de esta unidad no tienen desperdicio ni por confort ni por ajustes.
Mucho más cómodos que los bacquets de otros modelos ‘M’, brindan un excelente agarre que se puede variar abriendo o cerrando los cojines laterales. También tienen soporte lumbar, extensión de la banqueta, ventilación, calefacción, ajuste de reposacabezas… Una gozada tanto para viajar como para poner a prueba tus dotes como piloto, en resumen.
En la fila delantera, tanto el acceso como el espacio son buenos para personas de gran estatura. Además, el volante ofrece ajuste eléctrico, por lo que no es difícil acertar con la postura de conducción. La única pega que veo en este sentido es que los cinturones delanteros no tienen regulación en altura. En la segunda fila, el acceso es también cómodo.
De hecho, por diseño de la carrocería, el acceso y la altura en las plazas traseras resultan mejores en el Touring que en la berlina. No destaca por anchura ni por espacio para las piernas con respecto a algunos rivales, sin perjuicio de que haya espacio más que suficiente. Puede acomodar dos adultos de hasta 1,90 metros de altura sin problema.
Tres ya es más complicado, pues además de no brillar en anchura, el túnel central y las salidas de ventilación son bastante intrusivos. En suma, el mullido de la plaza central es más duro a causa del reposabrazos. En la segunda fila podemos equipar cortinillas y calefacción para los asientos. También hay iluminación LED, huecos, asideros y tomas USB-C.
Por último, el maletero cubica 500 litros, 70 menos que el resto de mecánicas. Los asientos de la segunda fila pueden abatirse en proporción 40:20:40 para brindar hasta 1.600 litros. El suelo queda plano, pero no totalmente horizontal. Brilla por tapizados y por sus formas regulares, sumando iluminación, argollas, ganchos y toma de 12V. El portón es eléctrico.
Motorización BMW M5 Touring
El BMW M5 Touring entra en una nueva era: la electrificación. A priori no parece una buena noticia, pero no nos engañemos, este coche es una auténtica bomba de relojería y bendito sistema M HYBRID específico. El segundo modelo más potente de la marca nos brinda la friolera de 727 CV (535 kW) de potencia y 1.000 Nm de par máximo.
La combinación de un motor V8 de 4.4 litros y altas revoluciones con tecnología M TwinPower Turbo y un motor eléctrico, más la transferencia de potencia mediante una caja de cambios M Steptronic de ocho velocidades y la tracción total M xDrive con tres modos de funcionamiento, nos permite acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3,6 segundos.
Esto lo convierte en uno de los familiares más rápidos del mundo. Asimismo, es capaz de recuperar de 80 a 120 km/h en 2,1 segundos y de alcanzar hasta 305 km/h con el M Driver’s Package. Es complicado necesitar mucho más que esto en el día a día. Además, el sistema híbrido enchufable no ha hecho desaparecer uno de los puntos fuertes del M5, su sonido.
Cada aceleración es un festín para los oídos, sobre todo, si llevamos las válvulas del escape deportivo abiertas. Circulando en modo eléctrico, BMW también ha tratado de mantener vivo el sonido del modelo en el habitáculo, aunque en este caso de manera artificial. No es lo mismo, pero al menos disimula bastante bien su naturaleza “cero emisiones”.
En modo EV la velocidad máxima es de 140 km/h.
Tal y como estás imaginando, la entrega de potencia es soberbia e imponente a cualquier ritmo y casi inmediata. Sin embargo, nos ha llamado la atención que esta se produce en todos los casos de una forma lineal y progresiva. El nuevo BMW M5 Touring no es tan impulsivo como antes y, con sus cifras, es de agradecer, especialmente en el día a día.
A nivel técnico, cabe destacar que el motor de combustión se beneficia de la más moderna tecnología M TwinPower Turbo, de un colector de escape de bancada cruzada y de una separación optimizada del aceite. Desarrolla una potencia máxima de 585 CV (430 kW) y un par máximo de 750 Nm. La potencia máxima del motor eléctrico es de 197 CV (145 kW).
Tiene un par nominal de 280 Nm, pero una etapa de preengranaje permite aumentar el par efectivo a la entrada de la transmisión hasta 450 Nm. La batería de alto voltaje, por su parte, va situada bajo el piso y tiene 18,6 kWh de energía utilizable. Gracias a ello, nos brinda una autonomía eléctrica WLTP de 67 kilómetros. En la práctica, ronda los 50 km.
La unidad de carga combinada del nuevo BMW M5 permite cargar con corriente alterna hasta 7,4 kW. Adicionalmente, encontramos hasta cinco modos de funcionamiento para el sistema híbrido:
- Hybrid, para una interacción controlada de forma inteligente entre el motor de combustión y el motor eléctrico para maximizar la eficiencia o el rendimiento, dependiendo de la situación de conducción.
- Eléctrico, en el que el motor de combustión sólo entra en juego al reducir la aceleración o utilizando las levas de cambio.
- eControl, que se utiliza para una recuperación eficaz de la energía de frenado y para mantener la carga de la batería a un nivel constante en torno al 80%.
- Dynamic y Dynamic Plus (con M Drive Professional), que activan el sistema de propulsión y el sistema de refrigeración para mantener la potencia a un nivel alto constante o generar breves ráfagas de potencia máxima durante la conducción en circuito.
La caja M Steptronic de ocho velocidades tiene un funcionamiento tremendamente suave durante una conducción tranquila. Sin embargo, su carácter varía en los modos más extremos, dejando notar con claridad cada cambio de marcha. Además, resulta muy rápida en todo momento, pudiéndose ajustar su funcionamiento en tres niveles:
- El modo Drivelogic 1 corresponde a una conducción eficiente.
- El modo Drivelogic 2 se presta a la conducción rápida con unos tiempos de cambio acortados.
- En modo Drivelogic 3 está optimizado para la conducción deportiva en el circuito gracias a sus tiempos de cambio extremadamente cortos.
Por último y con respecto a los consumos, BMW homologa un combinado WLTP de apenas 1,7 l/100 km. Evidentemente, tu BMW M5 Touring va a consumir más, mucho más. Nosotros hemos obtenido un combinado de 11,8 l/100 km practicando todo tipo de conducción, aunque es cierto que no hemos hecho un uso abundante de la batería.
En autopista, el consumo medio aprovechando la carga ha sido de 9,6 l/100 km; mientras que sin batería la cifra se ha situado en 9,9 l/100 km. En ciudad y zonas interurbanas, es donde más partido le vas a sacar al sistema híbrido enchufable, con cifras que pueden situarse por debajo de los 5 l/100 km. Para la rutina diaria, es una combinación perfecta.
Comportamiento BMW M5 Touring
El BMW M5 Touring representa una gran mejora en diversos aspectos con respecto a la anterior generación del M5. Es el caso del abanico de opciones de personalización y ajuste, la usabilidad en el día a día, el aplomo, la insonorización y la calidad de rodadura. Además, su tremendo peso ha logrado disimularse a la perfección por los ingenieros.
En autopista, es sin duda el más firme de toda la gama, pero permite recorrer cientos de kilómetros con gran confort. Si bien no filtra tan bien las irregularidades del asfalto, es un coche claramente menos duro que sus predecesores. Además, la insonorización está al nivel de los mejores, al igual que la calidad de rodadura pese a su bajo perfil de goma.
Cabe destacar que, pese a tener un esquema de suspensión similar al de otros Serie 5, la suspensión adaptativa M es específica. Equipa amortiguadores controlados electrónicamente. Las fuerzas de amortiguación para cada rueda son ajustadas progresivamente en función de las cambiantes situaciones de conducción, por medio de válvulas electromagnéticas.
Tampoco decepciona el funcionamiento de los ADAS, como el control de crucero adaptativo con guiadado de carril. Es suave y preciso, permitiendo al conductor relajarse en largos viajes. Donde seguramente menos convincente te resulte la firmeza de la suspensión deportiva adaptativa sea en zonas urbanas, especialmente en los resaltos.
En estos casos, el rebote del eje trasero es más evidente, aunque es justo señalar que en BMW han alcanzado un buen equilibrio y confort para la rutina diaria. Como os decíamos, este es uno de los aspectos que más gratamente sorprenden del nuevo BMW M5 Touring. Puedes conducirlo de manera dócil en la ciudad como cualquier otro Serie 5.
Sus predecesores, en cambio, eran más impulsivos, resultando algo bruscos en atascos y maniobras a baja velocidad. Además, el funcionamiento en modo eléctrico le brinda todavía más suavidad y silencio al conjunto. El mayor hándicap son las dimensiones, pese a la dirección activa integral (mueve las ruedas traseras hasta 1,5 grados), las cámaras y sensores que equipa.
A la hora de exprimir sus prestaciones, el abanico de opciones es uno de los más amplios de toda la gama. Esto supone una ventaja clara para quien está al volante, que puede ir graduando la libertad que ofrece el coche en función de su experiencia. En los ajustes más conservadores, es un coche que permite ir muy rápido con gran sensación de control y seguridad.
La dirección, tremendamente rápida y precisa, te marca con exactitud por dónde van las ruedas; al tiempo que esta mole de dos toneladas y media cambia de trayectoria como si de un compacto deportivo se tratase. El trabajo de ingeniería que hay bajo la piel del BMW M5 Touring es soberbio y se nota.
Es un coche más fácil de conducir en términos generales, pero a su vez capaz de ponerte los pelos de punta a medida que vas elevando el ritmo y haciendo su carácter más salvaje. En los reglajes más extremos, es un coche muy exigente que puede llegar a ponerle las cosas muy difíciles al piloto, que no conductor… No es para todos los públicos.
Al igual que otros modelos M, el sistema de tracción M xDrive con diferencial autoblocante de tipo activo tiene tres modos de funcionamiento: 4WD, 4WD Sport y 2WD. El más radical es este último, que manda toda la potencia al eje posterior y desactiva el control de estabilidad. De hecho, el propio coche no permite activar el Launch Control con este modo activado.
Desde el menú ‘M Setup’, el BMW M5 Touring ajustar numerosos aspectos de la conducción. Estos son la respuesta del cambio de marchas, la dureza de los amortiguadores, la dirección y los frenos; la gestión de la tracción total, la respuesta del motor y el nivel de recuperación de energía, entre otros. Tampoco faltan los dos modos ‘M’.
Disponibles desde los accesos directos del volante, nos permiten almacenar nuestras dos configuraciones preferidas. Uno de los aspectos que más llama la atención a la gente es la posibilidad de configurar el sistema de frenos. Gracias a un sistema eléctrico, regula la asistencia, modificando la presión necesaria para obtener una respuesta más dinámica.
Con ello, BMW asegura intervenciones mucho más rápidas y precisas en el sistema de control de estabilidad de conducción. También hay que señalar que la respuesta de frenado no se ve afectada en el conductor cuando las carreteras están mojadas, cuando hay aceleración lateral significativa o altas temperaturas a la hora de frenar.
Todo ello garantiza una medición precisa de la potencia de frenado en todo momento. El sistema está disponible para los dos equipos de frenado, el de serie y el compuesto por los discos M de carburo de silicio reforzado con fibra de carbono. Este último es el que equipa la unidad de pruebas y sorprende cómo las pinzas muerden los discos impasibles con menos recorrido de pedal.
Además, destaca la naturalidad con la que BMW ha dotado al conjunto para tratarse de un híbrido enchufable. La presencia de la frenada regenerativa apenas es apreciable cuando buscamos exprimir a fondo el coche. Este aspecto es importante, ya que cuando uno quiere sacarle partido a 727 CV, la precisión en la frenada es crucial.
Por último, el ‘M Mode’ nos permite acceder directamente a la configuración de los los sistemas de asistencia a la conducción, las pantallas e instrumentos digitales y el Head-Up display. Tenemos tres modos:
- Modo ROAD: Todos los sistemas de asistencia al conductor y opcionales están completamente activados.
- Modo SPORT: Los sistemas de asistencia al conductor están activos (en la configuración establecida por el conductor), ahora solo transmite alertas sobre límites de velocidad y restricciones de adelantamientos. Este modo desactiva todas las intervenciones en los sistemas de frenado y dirección, aparte de los avisos de advertencia por colisión o el asistente de evasión. Visibilidad M en los instrumentos y en el Head-Up Display (información relevante con una conducción deportiva).
- Modo TRACK: Para un uso en circuito, pues todos los sistemas confort y de seguridad están desactivados. El sistema de las pantallas se apaga para que el conductor esté centrado única y exclusivamente en el trazado, donde obtendrá una sensación ultra pura, inspirada en un coche de carreras con el sentimiento M. El grupo de instrumentos y la pantalla de visualización superior incluyen también la vista M.
Equipamiento
Entre el equipamiento de serie para España podemos encontrar cristales tintados para protección solar, luz ambiental, sistema de sonido envolvente Bowers & Wilkins, bandeja de carga inalámbrica, asistente de conducción plus, M Drive professional, alarma, faros M en negro brillo, asientos M Sport multifunción con reglaje eléctrico y memoria…
También de serie son el paquete exterior en negro, llantas de 20 pulgadas delante y 21 pulgadas detrás, climatizador de cuatro zonas, cámara del habitáculo, cable de carga professional, faros LED adaptativos, asistente de estacionamiento plus, BMW Live Cockpit profesional de 14.9 pulgadas, instrumentación digital de 12.3 pulgadas y el tapizado de cuero Merino, entre otros.
El sistema multimedia viene igualmente bien equipado, contando con una jueva interfaz de usuario, Great Entrance Moments, Apple Carplay y Android Auto sin cables, Alexa, Asistente Personal Inteligente de BMW más natural, radio DAB, tomas USB-C, BMW ID con varios perfiles de usuario, capacidad de aprendizaje y actualizaciones periódicas OTA, conectividad 5G, digital key plus, AirConsole…
El paquete de ADAS es igualmente completo, con elementos como sensores de lluvia y luces, control de crucero adaptativo, control de distancia en aparcamiento (PDC) delantero y trasero, sistema Active Guard Plus, llamada de emergencia inteligente, alerta y asistente de cambio involuntario de carril, alerta sonora para peatones, frenada de emergencia en ciudad con detección de peatones, ciclistas y vehículos, etc.
Como es habitual en BMW, se ofrecen varios paquetes de equipamiento muy completos con los que mejorar la dotación estándar; los mencionado accesorios de M Performance Parts y un extenso listado de opcionales. Eso sí, cuidado con la factura final, que el precio de partida ya arranca en unos nada despreciables 166.100 euros.
Ficha técnica
Dimensiones y capacidades | |
Largo | 5.096 mm |
Ancho | 1.970 mm |
Alto | 1.516 mm |
Batalla | 3.006 mm |
Vía delantera | 1.684 mm |
Vía trasera | 1.660 mm |
Capacidad maletero | 500 (1.630) litros |
Peso | 2.550 kilos |
Coeficiente aerodinámico | 0,34 |
Datos técnicos | |
Neumáticos delanteros | Hankook Ventus S1 evo Z – 285/40 ZR20 111Y |
Neumáticos traseros | Hankook Ventus S1 evo Z – 295/35 ZR21 110Y |
Suspensión delantera | Paralelogramo deformable |
Suspensión trasera | Paralelogramo deformable |
Barra estabilizadora | Ambos ejes |
Frenos delanteros | Discos ventilados |
Frenos traseros | Discos ventilados |
Diámetro de giro entre paredes | 12,6 metros |
Datos mecánicos | |
Motor de combustión | 8 cilindros en V |
Cilindrada | 4.395 cm³ |
Potencia motor de gasolina | 585 CV (430 kW) @ 5.600 – 6.500 rpm |
Par motor de gasolina | 750 Nm @ 1.800 – 5.400 rpm |
Potencia motor eléctrico | 197 CV (145 kW) |
Par motor eléctrico | 280 Nm |
Capacidad batería bruta/útil | 22,1 / 18,6 kWh |
Transmisión | Convertidor de par 8 velocidades |
Tracción | Total |
Aceleración (0-100 km/h) | 3,6 segundos |
Aceleración (80-120 km/h) | 2,1 segundos |
Revoluciones motor a 120 km/h (8ª vel.) | 1.900 rpm |
Vel. Máxima | Hasta 305 km/h |
Autonomía eléctrica | 67 km |
Potencia máxima de carga en CA | 11 kW |
Potencia máxima de carga en CC | N.D. |
Tiempo de recarga en CA (11 kW) | 2,15 horas |
Consumo WLTP combinado | 1,7 l/100 km |
Consumo real combinado | 8,4 l/100 km |
Emisiones CO2 | 39 g/km de CO2 |
Distintivo ambiental | 0 emisiones |
Capacidad depósito | 60 litros |
Seguridad y precio | |
Puntuación EuroNCAP | 5 estrellas de serie |
Precio mín (gama sin desc. /extras) | 164.550 euros (Berlina) |
Precio máx. (gama sin desc./extras) | 166.100 euros (Touring) |
PVP unidad probada sin opcionales | 166.100 euros |
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8.9
Sobresaliente
El BMW M5 Touring es una auténtica locura de coche. Serás incapaz de sacarle todo su potencial en la vía pública, pero en la pista lo vas a disfrutar como pocos. Más agresivo, espacioso, tecnológico, potente y seguro que nunca, el familiar bávaro monta por primera vez un sistema híbrido enchufable capaz de dejarte con la boca abierta por prestaciones. Por precio, no es de las opciones más caras.
Lo bueno
- Gran calidad de realización interior, aunque sin una clara mejoría con respecto a su predecesor pese a la sensación tecnológica.
- Abundantes posibilidades de equipamiento y personalización del chasis y la potencia.
- Confort para el día a día, agilidad y comportamiento dinámico superiores a pesar de sus dimensiones y de su peso.
- Fuerte apuesta por la tecnología en todos los sentidos.
- Prestaciones brutales con unos consumos equilibrados si se aprovecha la batería.
Lo mejorable
- Peso muy elevado, aunque al volante no se aprecie.
- Detalles que chocan, como la base de las guanteras de las puertas sin forrar o los cinturones sin ajuste de altura.
- Pierde maletero con respecto a otras mecánicas.
- Demasiado digital. El reemplazo de los botones por un sistema integrado con control de voz puede resultar complejo para muchos usuarios.
- La anchura y el espacio para las piernas en la segunda fila no destacan. Túnel central muy prominente.