Poca presentación necesita el Audi Q7 a estas alturas. El enorme SUV de hasta siete plazas es una de las alternativas más vendidas y recomendadas del segmento en el que compite. Si bien le pesan los años frente a algunos rivales, recientemente el todocamino alemán ha recibido una atualización que le mantiene muy fresco. Hemos probado los Audi Q7 50 TDI y Audi SQ7.
Si te estás planteando hacerte con un Audi Q7, debes saber que el modelo se ofrece con mecánicas diésel microhíbridas, híbridas enchufables y gasolina. Esta última opción queda reservada únicamente a los poderosos Audi SQ7 de cinco y siete plazas con 507 CV. En este caso, no hay versión RS como en el Audi Q8, aunque el SQ7 no va a decepcionarte.
Por otra parte, cabe destacar que las novedades del último restyling pasan por un remozado diseño exterior, unas pantallas interiores de mejor resolución y con mejor conectividad, la incorporación de nuevos elementos de equipamiento y mecánicas más eficientes. Gracias a ello, ofrece lujo y calidad a raudales, con un confort de marcha sobresaliente y mucha tecnología de seguridad.
En esencia, todo lo necesario para rivalizar con modelos de la talla de los BMW X5, Volkswagen Touareg, Mercedes-Benz GLE, Land Rover Defender y Discovery, Range Rover Sport, Toyota Highlander, Volvo XC90, Jeep Grand Cherokee, Lexus RX y Porsche Cayenne.. Por precio, el Audi Q7 es de los menos costosos -sin ser barato-. Solo quedan por debajo el Highlander, el Touareg y el XC90.
Diseño exterior
El Audi Q7 ahora luce la nueva identidad corporativa de Audi, con los aros bidimensionales que debutaron en el Q8 e-tron. En lugar de cromados, el nuevo logo está acabado en colores blanco y negro. Para la iluminación, puede equipar los faros HD Matrix LED con luz láser. Estos faros incorporan luces diurnas digitales y la posibilidad de seleccionar entre distintas firmas lumínicas.
Su frontal está protagonizado por la enorme parrilla Singleframe octogonal que ha sufrido ligeras mejoras. en ella luce los radares de los sistemas de asistencia y, en posición central, los cuatro aros. En el caso del Audi SQ7, las mejoras exteriores en materia de deportividad son las mismas que podemos equipar en el resto de la gama con el paquete S line.
Por su parte, la generosa luna delantera puede equiparse con cristal de confort climático y aislamiento acústico; así como limpiaparabrisas adaptativos con eyectores integrados. En el tercio inferior vemos dos entradas de aire en dos secciones que tienen un aspecto muy expresivo, los sensores de aparcamiento y una protección de bajos.
Visto de lado, tiene mucha presencia. Brinda una superficie acristalada de lo más generoso con los cristales posteriores tintados opcionales. No falta una superficie de las puertas limpia, salvo por la moldura inferior, y con servocierre de puertas opcional. Las carcasas de los retrovisores -eléctricos y calefactables en opción- pueden ser de carbono.
Actualmente hay disponibles nueve colores exteriores con tonos clásicos y diversos acabados: uniforme, perlado y metalizado. En este caso tenemos un particular verde personalizado de Audi Exclusive. La marca nos permite personalizar el color, con opciones casi infinitas. En esta unidad, los raíles del techo y el marco de las ventanillas van pintados en negro.
Además, podemos equipar el aislamiento acústico para puertas y cristales laterales. Llenando los musculosos pasos de rueda nos encontramos con unas llantas de aleación de 22 pulgadas. El tamaño varía según el acabado u opcionalmente, siendo este el mayor tamaño disponible. Están calzadas con unos neumáticos en dimensiones 285/35 R22 106Y para ambos ejes.
Respecto a sus dimensiones, es todo un barco. Alcanza los 5.07 metros de largo, 1.97 metros de ancho y 1.75 metros de alto. La batalla mide 2.995 mm y las vías delantera y trasera miden 1.672 y 1.676 mm, respectivamente. El coeficiente Cx es de 0,34, la superficie frontal de 2,87 m² y el factor de resistencia de 0,98.
En la zaga también resulta imponente. La horizontalidad está muy presente en elementos como las ópticas LED con indicadores dinámicos y luz digital personalizable, el portón de generosas dimensiones –eléctrico de serie- y el estilizado paragolpes. Llaman especialmente la atención elementos como el marcado spoiler superior con la tercera luz de freno y la gran luna trasera.
El conjunto lo rematan en el SQ7 las cuatro salidas de escape reales. Visto desde arriba, cuenta con una antena de tipo aleta de tiburón y los mencionados raíles de techo. Opcionalmente podemos incorporar un enorme techo panorámico de cristal. Para el exterior hay algunos opcionales y accesorios interesantes. Por ejemplo, el gancho de remolque con asistente, las pinzas de freno en rojo o las bacas para el techo.
Diseño interior
El interior del Audi Q7 es sofisticado y tecnológico. El habitáculo hereda la horizontalidad del exterior y el minimalismo de otros modelos de la gama. Sin embargo, lo lleva a un nivel superior en términos de lujo y refinamiento, como en los A8 y Q8. El conjunto es ergonómico, intuitivo, sencillo de utilizar y, sobre todo, muy cómodo. La pena es que en el SQ7 apenas hay cambios.
Como vas a poder ver en la galería de imágenes, una unidad diésel con paquete S line es prácticamente idéntica al SQ7. Los cambios se limitan a algunos detalles en color rojo, como en botón de arranque y las molduras en fibra de carbono. Por su parte, los asientos deportivos S plus son excelentes en agarre y mullido. Equipan reposacabezas integrado y múltiples comodidades.
Por ejemplo, ajuste eléctrico, soporte para los muslos, ajuste neumático de los laterales del asiento y soporte lumbar neumático. En opción, pueden completarse con masaje, memoria, ventilación y calefacción. En términos de calidad, tenemos unos ajustes impecables, una tapicería agradable al tacto, diversas pantallas con excelentes gráficos y materiales blandos en gran parte del habitáculo.
Únicamente encontraremos plásticos rígidos en las partes bajas del interior. En cualquier caso, estos se han cuidado a la vista y al tacto. Por supuesto, hay diversas tapicerías para los asientos en cuero o Alcantara y cuero. Tanto los elementos superiores como inferiores pueden tapizarse en este material, elevando la calidad del habitáculo. Adicionalmente, tenemos otras molduras y el paquete de luces ambiente y de contorno.
Desde luego, en calidad está muy por encima de Mercedes-Benz o Lexus. Las manos se posan cómodamente en un volante de cuero achatado que puede tener ajuste eléctrico y calefacción. Se ofrecen tres tipos de volantes y todos nos brindan acceso a las funciones más destacadas del sistema multimedia y el cuadro digital personalizable.
El nuevo Audi Virtual Cockpit se complementa con un Head-Up Display de buena calidad y muy completo.
La instrumentación digital de 12,3 pulgadas con pantalla Full HD permite elegir entre diversas vistas. También puede personalizarse en tres modos distintos. La arquitectura se combina perfectamente con el concepto de operación táctil. Prácticamente elimina los botones y controles sustituyéndolos por pantallas que nos ofrecen respuesta háptica. Eso sí, abunda el Piano Black.
El salpicadero se presenta elegante y bien esculpido. En la consola central, figura una pantalla de 10,1 pulgadas. Se integra hasta convertirse en casi invisible a la vista en la superficie de acabado negro brillante, denominada black panel. El problema de tantas pantallas son los reflejos cuando el sol incide sobre ellas, dificultándonos la visión.
En la pantalla inferior podemos teclear o escribir las direcciones de navegación.
En la consola central, que también posee ese efecto de panel negro, hay una segunda pantalla táctil de 8,6 pulgadas. La superficie de la pantalla táctil emite una señal acústica cuando se activa una función, imitando de esta manera a los interruptores tradicionales. Lo mismo sucede con el módulo que gestiona la iluminación.
Al pulsar sobre los botones en ellas presentes, notarás como un click. Esto te ayuda a saber que has seleccionado una determinada función. Personalmente, no me convence esta función, pero puede desactivarse. Respecto al climatizador integrado en una pantalla, su acceso y manejo quedan a la altura de la mano y no es complicado hacerse a él.
Los gráficos de todas las pantallas y su fluidez son dignos de mención. Cabe destacar la imagen en tres dimensiones que generan las cámaras del sistema 360º. Es un sistema realmente completo. Este puede equiparse con dos sistemas de sonido Bang&Olufsen, DAB, LTE, televisión digital y de pago, Apple CarPlay (inalámbrico) y Android Auto, el servicio de voz Alexa de Amazon basado en la nube…
Las superficies limpias y amplias transmiten la atmósfera de un salón de lujo. También podemos equipar las teclas de control con óptica de cristal negro y aluminio ampliada. El reposabrazos central delantero desplazable de forma longitudinal y ajustable en inclinación es de serie. Integra un pequeño hueco con las tomas SD y USB-C. La guantera es climatizada y tapizada.
En términos de habitabilidad, los Audi Q7 y SQ7 se ofrecen en una configuración de cinco o siete plazas. El acceso es cómodo en las dos primeras filas. Al gran tamaño de las puertas se une un considerable ángulo de apertura. En la segunda fila, personas de gran estatura viajarán cómodas, incluso si se trata de tres adultos no muy corpulentos.
Con la banqueta trasera plus, las plazas son individuales -35:30:35-, ajustables longitudinalmente y en el respaldo. La central alberga un reposabrazos que queda bastante alto, algo que se agradece. Respecto al túnel central, este es prominente, pero no exagerado. Las salidas de ventilación no son excesivamente intrusivas y dejan espacio para los pies.
Cabe destacar que los cinturones delanteros tienen ajuste en altura. Por otra parte, el climatizador de tres zonas es de serie y el de cuatro opcional. Como extra también tenemos el ‘paquete air quality’ con ionizador y otras funciones. Adicionalmente, la luna trasera y las ventanillas de la segunda fila pueden equiparse con cortinillas y calefacción en las plazas de los extremos.
La tercera fila de asientos es cómoda para niños o personas de pequeña estatura. Yo que mido 1,75 metros me doy con el techo y llevo las rodillas bastante flexionadas. Eso sí, el acceso es de los más cómodos. Para adultos pueden salvarte de un apuro, pero poco más. Tienen iluminación, apoyabrazos, posavasos y anclajes ISOFIX, pero no salidas de ventilación.
En el maletero podemos encontrar anclajes, iluminación, toma de 12V, raíles y varios botones: los de abatir los asientos, el de extraer/recoger el enganche de remolque -si lo equipamos- y los botones para bajar o subir en 55 mm adicionales la suspensión. Una función muy útil para cargar objetos pesados con facilidad. El borde de carga queda a 690 mm.
Las diferentes versiones del Q7 homologan diferentes capacidades de maletero. En esta tabla puedes ver las diferencias:
| TDI 5 plazas | TDI 7 plazas | TFSIe | SQ7 TFSI 5 plazas | SQ7 TFSI 7 plazas | |
| Volumen con 1 fila de asientos | 2.050 litros | 1.955 litros | 1.835 litros | 1.990 litros | 1.890 litros |
| Volumen mínimo con 2 filas de asientos | 865 litros | 770 litros | 650 litros | 803 litros | 705 litros |
| Volumen con 3 filas de asientos | – | 295 litros | – | – | 295 litros |
Motorizaciones Audi Q7
La gama del Audi Q7 está compuesta por motorizaciones diésel, gasolina y dos híbridos-enchufables. La gama de gasolina está representada por el poderoso SQ7 TFSI con 507 CV. En diésel hay dos opciones: el 45 TDI de 231 CV y el 50 TDI con 286 CV. Todos se combinan con un cambio tiptronic de ocho velocidades y con la tracción total permanente quattro.
Las versiones TFSIe híbridas enchufables (PHEV) combinan un motor de gasolina V6 de 3.0 litros con un potente motor eléctrico. Hay dos niveles de potencia. La versión de gama alta 60 TFSIe ofrece una potencia combinada de 489 CV; mientras que la más racional 55 TFSIe eroga 394 CV. Ambos modelos se benefician del distintivo ambiental CERO de la DGT.
Audi Q7 50 TDI quattro tiptronic
Para nuestras pruebas, por una parte hemos elegido el diésel más potente. Equipa un bloque de aluminio con seis cilindros en disposición longitudinal. Cuenta con 2.967 cm3 de cilindrada y recurre a la turboalimentación, la geometría variable y a un intercooler. Con ello, ofrece una potencia de 286 CV (210 kW) entre las 3.500 y las 4.000 rpm.
A esto se une un par máximo de 620 Nm entre las 2.250 y las 3.250 vueltas. La buena cifra de par nos ofrece una notable aceleración a partir de las 1.900 revoluciones. Incluso nos pega al asiento ligeramente. Eso sí, la respuesta al acelerador no es de las más inmediatas del segmento, ni siquiera en modo Dynamic. Requiere cierta anticipación en adelantamientos y salidas rápidas.
Parte de la culpa la tiene la gestión del cambio, que siempre trata de ir en la marcha más alta y a las menores vueltas posibles. Necesita bajar varias marchas cuando aceleramos. Circulando a 120 km/h, el motor gira a 1.750 rpm en octava velocidad, por lo que mantiene con solvencia elevadas velocidades de crucero. Además, el V6 tiene un agradable sonido.
A ello se suma un excelente aislamiento del motor. Es una mecánica con empuje más que suficiente incluso circulando cargados. Esto permite al Audi Q7 moverse con gran agilidad. En cifras, este motor brinda una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 6,1 segundos. Recupera de 80 a 120 km/h lo cubre en 4,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 241 km/h.
Adicionalmente, el Audi Q7 cuenta con hasta siete modos de conducción en el Drive Select. Estos adaptan diversos parámetros del vehículo a nuestras exigencias, como la respuesta del motor o la dureza de la suspensión adaptativa. Podemos ver los efficiency, comfort, auto, dynamic, allroad, offroad y un modo individual personalizable.
Latransmisión automática por convertidor de par de ocho relaciones es ideal para un uso tanto racional como ligeramente dinámico (que no deportivo) del Q7. Pese a ello, es cierto que no resulta tan rápida como el S tronic de la marca. A cambio, muestra un funcionamiento más suave, especialmente a baja velocidad.
Sube de marcha en el entorno de las 1.600 – 1.700 rpm durante una conducción tranquila. Además, cabe destacar que modifica su comportamiento en función del modo de conducción seleccionado. También ofrece modo ‘S’, levas tras el volante -de plástico y pequeño tamaño- y un modo secuencial en la palanca de cambios.
Hablamos además de una mecánica micro híbrida (MHEV). Va equipada con un sistema eléctrico de 48V, Stop&Start y sistema de regeneración de energía de la frenada. Con este sistema se consiguen reducir los consumos ligeramente. Todo ello sin elevar los costes de manera importante. Permite al Q7 beneficiarse de la codiciada pegatina ECO.
Eso sí, no es un sistema híbrido al uso. Solo funciona entre 55 y 160 km/h. En estas circunstancias, cuando el conductor levanta el pie del acelerador, el Q7 avanza en “modo vela” con el motor apagado hasta 40 segundos. El fabricante de los cuatro aros señala que esto permite ahorrar en torno a 0,7 l/100 km de combustible.
El sistema se alimenta por una batería de iones de litio de 480 Wh de capacidad. Está ubicada bajo el maletero y la tensión nominal del circuito es de 48V. Su vida útil es similar a la del vehículo. Además, consigue recuperar hasta 12 kW en la deceleración y es capaz de rearrancar el motor de combustión de manera casi imperceptible.
Básicamente se trata de una máquina eléctrica conectada al cigüeñal por una correa que actúa como generador y motor de arranque. Respecto a los consumos, Audi declara un combinado de 8,1 l/100 km. El consumo urbano real ronda los 10.5 litros, bajando a los 7.6 litros en carretera. Nuestro Q7 declaró una media de 8.4 l/100 km tras la semana de pruebas.
| Version | 50 TDI quattro 7 pl. - 6 cilindros en V |
|---|---|
| Cilindrada | 2.967 cm³ |
| Potencia | 286 CV (210 kW) @ 3.500 - 4.000 rpm |
| Par | 600 Nm @ 2.250 - 3.250 rpm |
| Peso | 2.250 kilos |
| Dimensiones Lar/An/Al mm | 5.063 / 1.970 / 1.741 mm |
| Volumen Maletero | 295 - 770 (1.955) litros |
| Aceleración 0 a 100 km/h | 6,1 segundos |
| Recuperación 80 a 120 km/h | 4,7 segundos |
| Velocidad máxima | 241 km/h |
| Consumo homologado | 8,1 / 10,8 - 8,3 - 6,9 - 8,1 l/100 km (Comb. / vel. baja - media - alta - muy alta) |
| Emisiones CO2 por km | 213 g/km de CO₂ (Euro 6) |
| Pegatina de la DGT | Eco |
| Precio de partida | 91.290 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Audi SQ7
El Audi SQ7 es una alternativa ideal para aquellos que quieran tener potencia a raudales y disfruten escuchando el sonido de la poderosa mecánica V8. En este caso, es una pena lo bien aislado que está el habitáculo del exterior. Como hemos comentado, el Q7 tope de gama nos entrega nada menos que 507 CV (373 kW) y 770 Nm de par máximo, por lo que es un coche muy rápido.
Tan solo necesita 4,1 segundos para ponernos a 100 km/h desde parado y 3,1 segundos para recuperar de 80 a 120 km/h. Como en el resto de la gama, la velocidad punta está limitada a los 250 km/h. Tampoco es un problema, ya que de lo que más vas a disfrutar es de la fuerza con la que empuja cuando pisas con ganas el acelerador. Es impetuoso, sí, pero siempre manteniendo todo bajo control.
Lo cierto es que pocas pegas se le pueden sacar a un motor como este, salvo la transmisión, que tarda algo más en reaccionar de lo que nos gustaría y, por supuesto, los consumos. Son tan alto como imaginas, pero es el precio a pagar por tener en casa la versión más deseada de la gama. Nuestra media tras la semana de pruebas ha sido de 12,1 l/100 km combinando todo tipo de escenarios.
En ciudad o practicando una conducción deportiva es muy fácil moverse por encima de esa cifra. Sin embargo, en autopista podemos rondar los 9 l/100 km sin ser especialmente cuidadosos con el acelerador. Además, con los 85 litros de depósito de gasolina con los que cuenta, tampoco es necesario ir con la gasolinera a cuestas. Sin duda alguna, una delicia.
Por último, cabe destacar que otros aspectos como la transmisión o los modos de conducción son los mismos que encontramos en la versión diésel. Por lo tanto, lo dicho en el apartado anterior es totalmente válido para el Audi SQ7.
Comportamiento Audi Q7
Como buen SUV, la altura del puesto de conducción es elevada, favoreciendo la visibilidad. Aquellas unidades que equipan la suspensión neumática adaptativa deportiva pueden sumar unos milímetros adicionales, o reducirlos. Esta suspensión, por la comodidad que aporta en carretera y la practicidad que ganas fuera del asfalto, compensa equiparla en el modelo.
La calidad de rodadura es excelente y la insonorización está al nivel de los mejores, aunque SUV más nuevos están mejor aislados. Pese a ello, viajar a bordo del Audi Q7/SQ7 es un verdadero gustazo. Es, sin duda alguna, el A8 de los todocaminos. Y, además, el confort se complementa con un elevado número de asistencias a la conducción y hasta siete modos de conducción.
A pesar de su mastodóntico aspecto, resulta manejable tanto en ciudad como en tramos de curvas, especialmente el SQ7. A ello contribuyen tanto la suspensión neumática de cinco brazos como la dirección de desmultiplicación variable con eje trasero direccional. Esta nos facilita infinitamente las maniobras. El diámetro de giro es de 12,5 metros entre paredes.
El SQ7 añade un diferencial trasero activo para mejorar la agilidad en curva, así como barras estabilizadoras activas (eAVS) que funcionan con una red eléctrica de 48 voltios. Desacopladas en una conducción off road o por autopista mejoran el confort; mientras que al acoplarse en una conducción más deportiva incrementan la resistencia a la torsión de manera independiente en cada barra.
En todo caso, es innegable que la física es la física y de rally no vas a poder ir. Lo que quiero decir es que, la altura rebajada de la carrocería, el eje trasero direccional y los diversos modos de conducción, hacen que no parezca un vehículo tan grande y pesado. Si bien no es el más ágil de entre sus rivales, sí que es de los que mayor confianza aportan al volante a su conductor.
En todas las versiones, ofrece unos cambios de apoyo bastante rápidos y naturales, con un comportamiento general tirando a neutro. Al final es lo que buscan aquellos conductores menos experimentados que lo que quieren es circular rápido, con seguridad. Y ese es su punto fuerte, la elevada sensación de seguridad y control, algo habitual en la gama Audi.
Fuera del asfalto, también es capaz de hacer sus pinitos. El núcleo del sistema de tracción total permanente quattro es un diferencial central con regulación puramente mecánica. Distribuye el par entre los ejes delantero y trasero en una relación de 40:60 en condiciones normales de conducción. Cuando es necesario, transfiere la mayor parte al eje con mejor tracción.
No es la mejor del mundo fuera del asfalto, pero sí que resulta muy útil en el apartado dinámico del modelo, especialmente a la hora de circular ligeros. Es importante también tener en cuenta los neumáticos de serie, que son de carretera. No encontraremos ni reductora ni bloqueos de diferencial. Sí que equipa un asistente de descenso de pendientes.
Por cotas, el Audi Q7 es capaz de superar obstáculos medianamente complicados en el modo off road/lift del Drive Select. Cuenta con un ángulo de entrada de 25,4 grados, de salida de 22,1 grados y ventral de 20,9 grados. La profundidad de vadeo es de 250 mm y la capacidad de pendiente del 60%. También tenemos una altura libre de 245 mm.
Para el equipo de frenos, el Audi Q7 monta de serie unos discos ventilados de 17 pulgadas en ambos ejes. Su funcionamiento y tacto son normales en el segmento, sin nada que destacar. Lo que sí podemos equipar opcionalmente son pinzas de freno en color rojo. El Audi SQ7 monta discos ventilados de 400 mm de diámetro en el eje delantero y ventilados de 350 mm en el trasero.
Por último y, respecto a los sistemas de asistencia a la conducción, estos se agrupan en paquetes y en la última entrega son más completos. El abanico es muy amplio, pudiendo encontrar varios niveles de pre sense, regulador de velocidad adaptativo con lector de señales y adaptación de la velocidad, sensor de ángulo muerto, asistente de mantenimiento de carril, asistente de aparcamiento…
Equipamiento y precio
En nuestro mercado, el Audi Q7 cuenta con cuatro líneas de acabado: Advanced, S line, Black line y SQ7. En todos son de serie el climatizador automático de tres zonas, la renovada instrumentación configurable Audi Virtual Cockpit de 12,3 pulgadas, sensor de lluvia, encendido automático de luces, sistema de navegación, suspensión adaptativa, tracción total…
También sin costes ofrecen sistema de audio con bluetooth, lector de tarjetas SD, puertos USB-C, freno de mano eléctrico, suspensión adaptativa, acceso a internet, portón eléctrico, llantas de 19 pulgadas, faros LED, asientos delanteros con ajuste eléctricos y lumbar, tapicería en cuero y Audi parking system plus con cámara trasera, entre muchos otros elementos.
El acabado S line incorpora los paquetes S line exterior e interior con asientos deportivos delanteros, iluminación ambiente, llantas de aleación de 20 pulgadas y suspensión neumática deportiva. El acabado Black line ofrece un estilo único con llantas de aleación de 21 pulgadas, paquete de estilo gris oscuro, barras de techo y carcasas de los retrovisores en negro y lunas Privacy.
El Audi SQ7 incorpora los detalles en color negro, molduras en fibra de carbono, la estética más deportiva, paquete de asistentes más completo, volante calefactable, asientos deportivos S con memoria para el conductor, cuero Valcona con patrón de rombos, banqueta trasera plus, el paquete de luces ambiente y de contorno… Remata el conjunto un amplio abanico de paquetes y opcionales.
En España, los precios recomendados para la gama del Audi Q7 2025 sin descuentos ni promociones arrancan en 85.200 euros. Las versiones híbridas enchufables pueden obtenerse desde 89.030 euros; mientras que el prestacional Audi SQ7 arranca en unos nada despreciables 128.900 euros.
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8.2
Notable+
El Audi Q7 es un auténtico SUV de lujo. Hay calidad, equipamiento y calidad de rodadura a raudales en el conjunto, aunque pagarás bastante por ello. Lo tienes disponible con mecánicas diésel, gasolina e híbridas enchufables, lo que da lugar a un amplio abanico de distintivos ambientales adaptados a todos los gustos. No es el más dinámico, pero si una de las alternativas más equilibradas en todos los aspectos.
Lo bueno
- Gran habitabilidad, especialmente con la banqueta trasera de asientos individuales. Esta ofrece gran modularidad.
- Amplio abanico sistemas de asistencia, radares, sensores y demás, al servicio de la seguridad y el confort.
- Buenas prestaciones en cualquier tipo de situación.
- Su calidad de rodadura, su insonorización y su confort son excelentes, especialmente con la suspensión neumática. Esta aporta un plus fuera del asfalto o a la hora de cargar objetos pesados en el maletero.
- Dinamismo gracias al eje trasero direccional y la dirección de desmultiplicación variable.
- Posibilidades de equipamiento prácticamente infinitas.
Lo mejorable
- Abuso del Piano Black en el interior, muy sucio y sensible a los arañazos.
- Precio de los opcionales muy elevado, aunque gracias a ellos puedes tener un coche que te va a enamorar, especialmente en los viajes largos.
- La dirección es realmente cómoda, pero su exceso de asistencia la hace ser demasiado artificial y transmite poca información.
- Equipamiento básico generoso, pero corto en innovación.
- Respuesta al acelerador algo lenta a causa de la gestión del cambio que siempre busca ir en la marcha más alta posible en la gran mayoría de modos del Drive Select.
- No puede equipar la brillante suspensión del Audi A8, la cual lee la calzada para preparar al vehículo anticipadamente.

















































































































