El BMW M5 ha dado mucho de qué hablar desde su lanzamiento. Lo ha hecho por diferentes motivos, que van desde su imponente estética y su sobrada potencia hasta su elevado peso. La cuestión es que se trata de una bestia de alto rendimiento sin igual, aunque ya sabemos cómo es el mundillo de los especialistas del mercado de accesorios. Hoy la protagonista es la puesta a punto de Mansory.
Como es habitual, el exterior del BMW M5 desarrollado por el preparador es cuanto menos extravagante. Lo primero que llama la atención es su agresivo capó de fibra de carbono con ventilaciones integradas. A ello se suman un divisor delantero y una moldura para las entradas de aire desarrolladas en el mismo material ligero. Debe de ser una locura verlo por el retrovisor acercarse a toda velocidad.
Avanzando por la vista lateral, nos encontramos con nuevas branquias laterales de fibra de carbono, los escudos de la compañía alemana en los guardabarros delanteros, faldones laterales más definidos y carcasas de retrovisores a juego. Ponen la guinda del pastel un nuevo juego de llantas forjadas ultraligeras de 22 pulgadas con diseño multirradio que reducen el peso del conjunto.
Ya en la zaga, son protagonistas el salvaje difusor, los tres tubos de escape, unas nuevas molduras para los reflectores y el doble alerón. Como estarás imaginando, la fibra de carbono es el material elegido para su desarrollo. Por último y, en el interior, el cuero negro se combina con los detalles en naranja. No faltan las alfombrillas personalizadas y los pedales deprotivos.
Bajo el capó del BMW M5 de Mansory
La séptima generación del BMW M5 llega por primera vez con un sistema de propulsión híbrido enchufable. La combinación de un motor V8 con tecnología M TwinPower Turbo y un motor eléctrico, más la transferencia de potencia mediante una caja de cambios M Steptronic de ocho velocidades y la tracción total M xDrive, le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos.
La potencia máxima de serie es de 727 CV (535 kW), a los que se suma un par de nada menos que 1.000 Nm. ¿sUficiente? No para Mansory, quien ha afinado el V8 biturbo de 4.4 litros para conseguir una cifra conjunta de 850 CV (625 kW) y 1.150 Nm de par máximo. Como guinda del pastel, la cubierta del motor también ha recibido un extra de fibra de carbono, junto con la firma del especialista.