Diseño/Estética
Calidad de Acabados
Equipamiento
Habitabilidad
Maletero
Motor/transmisión
Relación valor-precio
7.5
Notable
Sin lugar a dudas una apuesta interesante para cubrir la fuerte demanda de espacio que la clientela de este segmento demanda. Los asientos opcionales de la tercera fila son la guinda del pastel en el caso de querer contar con espacio adicional para trasladar niños.
En Febrero de 2014 estallaba la noticia, BMW lanzaría al mercado un monovolumen y…!tracción delantera¡. En ese momento nacía Serie 2 Active Tourer, un modelo con el que la marca de Múnich se introduciría en el segmento de los compactos familiares premium para hacerle frente a Mercedes con su Clase B [ver prueba Mercedes Clase B]. Después de entrar en este nuevo segmento en el que el pasado año 2014 solo un 7% de la producción fueron modelos premium, BMW decide un año después dar un paso más con el objetivo de ampliar el mercado y sale a la luz el Serie 2 Gran Tourer. Con esta estrategía, se convierte en la única marca que ofrece un modelo premium de hasta siete plazas dentro de este segmento.
Respecto al Active Tourer [ver prueba Serie 2 Active Tourer] presenta pocas diferencias excepto claro está, en precio y tamaño. A nivel mecánico presenta una oferta similar de motorizaciones y también está desarrollado sobre la misma plataforma con tracción delantera, creciendo el Gran Tourer en 21,4 cm de largo, 5,3 cm de alto y aumentando también la distancia entre ejes en 11 cm. Gracias a ello se incrementa el espacio interior, la capacidad del maletero y la altura del habitáculo haciendo a este modelo un vehículo más funcional y versátil en cada situación.
Diseño exterior
Si nos situamos enfrente del Gran Tourer pensaremos que estamos ante el Active Tourer, pero basta con darse una vuelta alrededor de este para comprobar que estamos ante el “hermano mayor”. En la parte delantera destacan los enormes “riñones” propios de la marca acompañados de unos faros con un diseño afilado que cuentan en su interior con los también conocidos angel eyes, incorporando en ellos las luces diurnas con tecnología tipo LED. Los antinieblas incorporados en el paragolpes, son de serie en el acabado que tenemos ante nuestros ojos, el Advantage –el más vendido en el Active Tourer y posiblemente en el modelo que hoy nos ocupa-.
Es en la vista lateral donde observamos las diferencias con el Active Tourer, los 21 cm extra hacen que tenga una longitud total de 4,55 cm, pero tampoco es apreciable y sigue guardando esa línea compacta debido a que aunque ha aumentado, la altura no es exagerada. Ya sabemos que BMW es sinónimo de deportividad y aunque estamos ante un monovolumen, su diseño presenta unas líneas muy marcadas a lo largo del lateral que acentúan este carácter. Las llantas en 16” son de aleación con un diseño que muestra cinco palos dobles y van calzadas sobre neumáticos Hankook Ventus S1 evo2 en medida 205/60.
Al igual que ocurre con la parte delantera, la trasera es muy similar al Active Tourer, diferenciándose de este por los catadriópticos situados en el paragolpes Destaca por sus grandes faros con un diseño similar al resto de berlinas de la marca. El portón cuenta con apertura y cierre eléctrico con unas teclas situadas en el guarnecido interior y en el panel de la puerta del conductor. Esto se puede combinar con la opción existente dentro del paquete confort, de apertura y cierre mediante un sensor situado bajo el paragolpes trasero pudiendo ajustar la altura de apertura en el display de control. En la parte izquierda del difusor inferior del paragolpes se sitúa la salida de escape cromada en forma circular, siendo doble en las motorizaciones 220d xDrive y 220i.
Diseño interior
Cuando te introduces en el interior del Gran Tourer tienes dos sensaciones, por un lado sabes que estas dentro de un BMW ya que aunque el salpicadero ya no presenta las líneas rectas de modelos de antaño, todo está orientado hacia el conductor, para que solo se preocupe de una cosa, conducir; por otro lado sabes estas sentado en uno de los tres modelos premium que ocupan este segmento ya que enseguida aprecias que la calidad de los acabados es latente. Desde el puesto de conducción nos encontramos con el volante multifunción de serie, compuesto por tres brazos y acabado en cuero desde el que se puede manejar el sistema de audio y el teléfono
Si giramos la vista ligeramente hacia la derecha nos encontraremos con una pantalla de 6,5″ integrada en la parte superior del salpicadero, donde se proyecta la información del sistema de navegación, así como la información del sistema de audio y los servicios del Connected Drive. Las órdenes las damos desde el iDrive Controller, situado en la consola que se encuentra entre los dos asientos delanteros. En la consola central acabada en negro brillante se sitúa el equipo de sonido BMW Professional y debajo de este el sistema de climatización bizona. Las teclas para seleccionar los diferentes modos de conducción (Eco-Pro, Comfort y Sport) se encuentran en el inferior de esta.
Respecto a su habitabilidad interior y funcionabilidad el Gran Tourer incorpora numerosos huecos portaobjetos y existe la posibilidad de incluir mesitas plegables en los respaldos de los asientos delanteros. Tanto los asientos delanteros como los traseros pueden albergar personas de talla alta gracias en parte al aumento en 2 Cm de la altura al techo. Estos últimos cuentan con un reglaje longitudinal de 13 Cm y sus respaldos se pueden abatir en secciones 40:20:40 mediante unas cómodas tiras situadas en la banqueta o un pulsador situado en el maletero.
La capacidad de maletero es de 645 litros con la configuración de las cinco plazas o 1.905 litros con los asientos plegados, ya que en caso de incorporar la tercera fila de asientos se ocultan dejando una superficie totalmente plana. Además existe en opción la posibilidad del respaldo abatible en el asiento de copiloto con un incremento de 217€, pudiendo albergar un objeto más voluminoso, como por ejemplo una tabla de surf. La tercera fila de asientos tiene un sobrecoste de 900€ y la capacidad del maletero se reduce a 560 litros. Su acceso es relativamente sencillo gracias al reglaje longitudinal de la segunda fila. No obstante, como ocurre con la mayoría de modelos de este segmento que incorporan una tercera fila de asientos, están pensadas para acoger a niños o personas adultas de talla media debido al poco espacio para las rodillas y a una menor altura al techo.