En los últimos años, los fabricantes de automóviles chinos han sorprendido al mundo con su capacidad para desarrollar y lanzar nuevos vehículos sin igual. Parecía que sacaban nuevos modelos de coches al mismo ritmo que los fabricantes de teléfonos inteligentes lanzaban productos al mercado. A pesar de la celeridad de las marcas chinas, BMW afirma que ha alcanzado un nivel de innovación y eficiencia que incluso supera a la industria china.
El director de desarrollo de la firma alemana, Joachim Post, aseguró en una entrevista con Handelsblatt que la compañía está lista para una ofensiva de producto sin precedentes: 40 modelos nuevos así como actualizaciones llegarán al mercado en los próximos dos años como parte de la estrategia Neue Klasse.
BMW acelera su transformación con la Neue Klasse
La Neue Klasse representa una nueva era para BMW, marcada por diseños revolucionarios, plataformas muy avanzadas y baterías más eficientes. El objetivo no es desarrollar un coche rápido de forma aislada, sino aplicar un salto tecnológico integral en toda la gama.
“Podemos sacar coches al mercado como si fueran pretzels, nadie nos va a imitar tan rápido en lo que planeamos hacer en los próximos dos años. Lo que estamos haciendo ahora es más que ‘China Speed’”, declaró el directivo.
Inteligencia artificial: la clave de la velocidad de BMW
Uno de los factores que han permitido a BMW acelerar el proceso de desarrollo es la inteligencia artificial. Desde la marca han destacado que las herramientas de IA están revolucionando la forma en que la marca diseña software y resuelve problemas de ingeniería.
Tareas que antes requerían un día completo ahora pueden resolverse en minutos gracias al uso de algoritmos inteligentes. Además, la IA permite preservar el conocimiento de los ingenieros dentro de la compañía, asegurando que la experiencia no se pierda aunque un empleado se retire o cambie de puesto.
La respuesta de los rivales alemanes y chinos
Mientras Audi habla de trabajar a “China Speed” con su próximo TT, BMW asegura que su estrategia va más allá. La marca de Múnich busca no solo igualar, sino superar la rapidez de los fabricantes chinos al combinar procesos digitales, inteligencia artificial y una arquitectura de vehículos completamente nueva.