Muchos recordaréis a Gumpert y su Apollo, la empresa que acabó quebrando. Sin embargo y, gracias a los inversores de Ideal Team Venture con sede en Hong-Kong -los mismos propietarios de De Tomaso-, esta compañía volvió a la vida bajo una nueva denominación: Apollo Automobile GmbH. Su última propuesta fue presentada en el Salón de Ginebra 2016 y, bautizado como Apollo Arrow, este deportivo se inspiraba “en los tiburones y el caza F-22 Raptor”, luciendo con ello un diseño mucho más agraciado que el Gumpert Apollo.
Pero si su envoltorio te parece extremo, ojo a lo que se escondía en sus entrañas: un poderoso bloque V8 de 4.0 litros que prometía 1.000 CV a 6.750 rpm y 1.000 Nm de par máximo a 3.650 rpm. Todo ello asociado a una caja caja de cambios secuencial de siete velocidades que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 2,9 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 360 km/h. ¿Su precio? Se estimaba que nada menos que 1.034.953 euros, lo que lo convertiría en uno de los hypercars más caros de 2017, pero lo cierto es que no lo hemos visto ni e Ginebra ni en el Festival de Velocidad de Goodwood.
Sin embargo, parece ser que no todo está perdido, y es que este vídeo-teaser nos adelanta que queda muy poco para conocer el último superdeportivo de la compañía (el próximo martes 24 de octubre), el cual se llamaría IE y no Arrow. El vídeo revela un coche con proporciones similares a las del Apollo Arrow, aunque encontramos importantes novedades como el imponente alerón curvado de fibra de carbono o la triple salida de escape en posición central flanqueada por un conjunto de luces posteriores. En el interior, asientos de tipo bacquet o un volante desmontable serán los protagonistas, por no hablar del salvaje sonido de su mecánica para plantar cara al Mercedes-AMG Project ONE, el Aston Martin Valkyrie o el Hyper-GT de McLaren que conocimos ayer.
Al parecer, la Scuderia Cameron Glickenhaus (SCG) y la conocida casa italiana Manifattura Automobili Torino (MAT) se asociaron con Apollo para crear el Arrow y una variante solo apta para circuitos denominada Titán. Su nueva carrocería completamente rediseñada iba a estar basada en la del SCG003C, pero desde Apollo han confirmado que SGC ya no forma parte del acuerdo, así que no sabemos hasta que punto llegó la colaboración. Por otra parte, se espera que la variante de circuito esconda en sus entrañas un bloque V12 atmosférico de 800 caballos de potencia, mientras que para el Apollo de producción se reservaría el poderoso V8 biturbo de 4.0 litros con 1.000 CV inicial.