Según la marca, una fuerte demanda de clientes que buscan una nueva gama de modelos de Maserati, tiene a la marca de automóviles buscando soluciones para completar la pobre gama con la que cuentan en la actualidad.
La clara apuesta del SUV no parece resultar lo suficientemente atractiva para los clientes que buscan un auténtico deportivo italiano.
Tal y como os comentamos hace unos días el CEO de Fiat Chrysler Automóviles (FCA) Sergio Marchionne quiere que Maserati sea para el grupo italiano lo que Porsche es para el Grupo Volkswagen.
El año pasado, la marca italiana de lujo vendió 15.400 vehículos en todo el mundo, menos del 10 por ciento de las 160.000 entregas que efectuó el fabricante de automóviles con sede en Stuttgart.
Para 2015, Marchionne quiere vender 50.000 unidades al año, un crecimiento exagerado que el CEO estima que será factible dada la llegada de nuevos modelos que harán que la marca sea mucho más atractiva que hasta la fecha.
Aparte del lógico SUV, la empresa está estudiando la posibilidad de dar luz verde al Afieri, un concepto casi terminado que pudimos ver en el pasado Salón de Ginebra
Según Automotive News, el fuerte aumento de las ventas podría allanar el camino para la llegada del Alfieri en los próximos dos años. Desde principios de 2014, el fabricante de automóviles italiano ha estado recibiendo unos 3.500 pedidos mensuales de media y si esa cifra se mantiene estable hasta finales del año, las ventas de Maserati podrían llegar a más de 40.000 unidades.
Una completa y atractiva gama de modelos serán la salvación de la marca que con el Alfieri además podría plantarle cara a modelos como el Porsche 911 o el Jaguar F-Type.
Así es el Maserati Alfieri
En el habitáculo de 2+2 plazas, la sencillez y el minimalismo son los criterios que han inspirado a los diseñadores. El salpicadero suspendido se inspira conceptualmente en el del Maserati 5000 GT. La cabina, con un diseño simple y ordenado en dos tonalidades, rodea a una pantalla TFT.
El cuadro de instrumentos tiene una configuración clásica con dos instrumentos indicadores principales separados por otros dos más pequeños. Los indicadores analógicos se han sustituido por las pantallas TFT que indican la velocidad y las revoluciones.
Bajo el capó del Alfieri encontramos un motor V8 de 4,7 litros Made in Maranello que proporciona 460 CV a 7.000 rpm. y 520 Nm a 4.750 rpm. Gracias a la configuración especial del escape, el sofisticado V8 produce un impresionante rugido.
El cambio de seis marchas accionado eléctricamente (MC Shift) se ha montado junto al diferencial trasero con deslizamiento limitado y está conectado al motor con un tubo de torsión rígido. Gracias a la disposición cambio-diferencial, el Alfieri Maserati cuenta con una distribución del peso en la parte delantera y trasera de 47:53.
Para parar al deportivo italiano la marca emplea frenos de disco carbocerámicos heredados directamente del GranTurismo MC Stradale y combinados con pinzas de freno Brembo.