Classic Recreations, uno de los preparadores más reconocidos en el mundo del tuning con base de Ford Mustang o de modelos Shelby American, se ha declarado oficialmente en bancarrota bajo el Capítulo 11 en el estado de Texas.
Con unos activos que oscilan entre el medio millón de dólares y un millón de dólares y pasivos que podrían llegar hasta los 10 millones, la empresa se enfrenta uno de los momentos más difíciles de su historia.
Classic Recreations es un icono de los restomods y está con una grave crisis financiera
Durante años, Classic Recreations fue sinónimo de lujo, especializándose en restomods de con base de Mustang con carrocerías de fibra de carbono, interiores artesanales y mecánicas modernas firmadas por Ford Performance. Modelos como el Shelby GT500CR Centennial Edition consolidaron su reputación como uno de los preparadores más innovadores del nicho.
A pesar de esto y de su buena acogida la empresa no ha podido evitar la crisis financiera. Algunos documentos judiciales revelan que la compañía cuenta con al menos 50 acreedores y que sus deudas líquidas son de al menos 3,4 millones de dólares lo que les permite acogerse a la Subcapítulo V del Capítulo 11, diseñada para pequeñas empresas.
Shelby American revocó su licencia
Uno de los golpes más duros para la compañía ha sido la finalización de su acuerdo de licencia con Shelby American. Este varapalo podría afectar seriamente a su capacidad para comercializar modelos bajo la prestigiosa insignia “Shelby”. Hasta ahora, muchos de sus vehículos llevaban el nombre de Carroll Shelby, un sello de autenticidad clave para su acaudalada clientela.
La pérdida de esta licencia plantea interrogantes sobre el futuro de la marca y de sus emblemáticos proyectos.
¿Seguirá operando Classic Recreations?
Aunque se ha iniciado el proceso de reestructuración financiera, aún no está claro si Classic Recreations continuará produciendo sus codiciados modelos de Mustang. La empresa no ha emitido comunicados oficiales.
¿Qué significa esto para el mercado de restomods?
El anuncio ha generado preocupación entre fans, coleccionistas y propietarios actuales de vehículos de Classic Recreations. En un mercado donde los Mustangs personalizados y de alto valor han ganado fuerza, esta bancarrota refleja los riesgos económicos de operar en un nicho de lujo altamente competitivo.
Por ahora, el futuro de Classic Recreations —y de sus icónicas reinterpretaciones del Mustang— queda en pausa. Habrá que esperar a conocer más sobre su futuro.
Imagen | Classic Recreations