El Alpine Alpenglow esboza cómo serán los modelos Alpine del mañana, tanto de carretera como de competición. Alpenglow es más que un concept-car, es un verdadero manifiesto de la marca, un acto fundacional de sus ambiciones y de su plan de desarrollo, un símbolo que materializa el proyecto Renaulution antes de la llegada de los tres próximos modelos del « Dream Garage ».
Este concept-car es la madre de todos los futuros Alpine por su diseño, tecnología e innovaciones, respetando la historia de la marca.
Alpenglow interpreta un futuro de emisiones limpias para los vehículos de competición del futuro y para las nuevas generaciones de productos Alpine. El hidrógeno verde es una de las soluciones previstas por la marca para la movilidad sostenible. El motor de hidrógeno prácticamente solo emite vapor de agua durante su combustión. El agua se convierte así en un elemento clave en el diseño de Alpenglow.
Los colores y los materiales utilizados también son indicativos de cómo serán los Alpine del futuro: modelos en los que la emoción y la tecnología se unen para hacer que la experiencia de conducción sea única y auténtica.
Alpenglow, un nombre que encaja perfectamente. Este fenómeno luminoso en el que una raya horizontal de luz teñida de rojo aparece en las montañas antes del amanecer y después del atardecer, expresa claramente la misión de este concept-car: ensalzar el momento en que se revelan las formas y tecnologías revolucionarias del mañana, en el que la marca ofrece un atisbo de su próxima etapa, la del futuro Alpine.
Un monoplaza en el que el conductor se encuentra en una posición central, unido al habitáculo y rodeado por los dos depósitos de hidrógeno.
El interior y el exterior de este concept-car están asociados. Una envoltura ligera y flotante rodea al conductor, que es uno con el material.
Inspirado en las carreras de resistencia, el volante geométrico del concept-car Alpenglow invita al conductor a imaginar una experiencia de conducción deportiva y de alto rendimiento. La identidad Alpine se evoca a través de los copos de nieve integrados en un prisma central, cuyo logotipo aparece en el fondo, recordando el universo alpino y montañoso que define este objeto creativo y misterioso. Las levas de cambio transparentes y retroiluminadas refuerzan la sensación de ligereza en un interior estilizado, donde solo cuenta la experiencia a bordo. La parte inferior del volante también cuenta con dos selectores con varias funciones integradas que recuerdan directamente a los volantes de Fórmula 1 y LMP1.
La firma luminosa de Alpenglow evoluciona para evocar una nueva estética. Al fusionarse con la de los Alpine actuales, la nueva firma deja su huella con su modernidad y potencia, sin dejar de ser fiel a la identidad de la marca.
En la parte trasera, las luces azuladas presagian el uso del hidrógeno como combustible puro. Las ruedas, con sus llantas transparentes que recuerdan a los copos de nieve, también evocan la identidad Alpine.
El alerón trasero de este concept-car destaca por su total transparencia, que disimula su presencia y funcionalidad. Más allá de su aspecto tan ligero, su importancia es fundamental. Es móvil, lo que permite reducir la resistencia aerodinámica y generar más carga aerodinámica.
Con una longitud de más de 5 metros, una anchura de más de 2 metros y una altura de menos de 1 metro, este concept-car tiene las proporciones de un coche de ensueño.
Un nuevo tono de azul aparece en la carrocería del concept-car Alpenglow, una evolución del icónico azul Alpine que siempre está en movimiento. Más brillante y rico, está compuesto por un material nacarado muy fino que genera efectos líquidos, luces y sombras cambiantes, como en la superficie de una masa de agua o un océano, así como un volumen muy marcado y denso.
Fuente | Alpine