Volkswagen niega los rumores de estar en una crisis financiera. El grupo automovilístico alemán ha salido a defenderse de las informaciones publicadas por el diario Bild, que aseguraban que la compañía necesitaría 11.000 millones de euros en 2026 para equilibrar sus cuentas.
Según el medio germano, la firma tendría dificultades para obtener financiación, lo que habría encendido las alarmas en el sector automovilístico europeo.
Sin embargo, Volkswagen ha calificado las informaciones como “especulaciones sin fundamento” y ha subrayado que su situación financiera es estable. “Nos encontramos en una posición sólida y seguimos centrados en nuestra prioridad: la solidez financiera”, aseguró la compañía en un comunicado oficial.
Volkswagen rechaza los rumores sobre una crisis de liquidez
El diario Bild publicó que el flujo de caja libre (net cash flow) del grupo se desplomaría en 2026, lo que dejaría un agujero de 11.000 millones de euros. Según esa versión, el equipo financiero liderado por Arno Antlitz habría detectado este desequilibrio durante una revisión interna en Wolfsburgo.
No obstante, Volkswagen ha desmentido categóricamente estas afirmaciones. Fuentes del grupo aseguran que los datos citados por Bild no corresponden con sus previsiones y que la empresa continúa avanzando en el cumplimiento de los objetivos de su programa ‘Future Volkswagen’, centrado en la reducción de costes, la optimización de capacidades y la digitalización de procesos.
Sin cambios en la dirección ni recorte en la producción
Otro de los puntos controvertidos del artículo de Bild hacía referencia a un supuesto relevo en la cúpula directiva: el medio apuntaba a que Michael Leiters, exdirectivo de Ferrari, sustituiría a Oliver Blume al frente de Porsche en 2026. Volkswagen ha negado esta información y ha confirmado que no hay cambios previstos en su liderazgo.
Asimismo, el grupo ha rechazado los rumores sobre una posible reducción de la producción del Golf en su planta de Wolfsburgo. Según Bild, el fabricante estaría afectado por la falta de semiconductores derivada del conflicto entre Países Bajos y China por la empresa Nexperia. No obstante, Volkswagen ha asegurado que sus operaciones continúan con normalidad y que no existen planes para frenar la producción
Contexto: un sector automovilístico bajo presión
Volkswagen ha tenido que salir a desmentir porque ya están cansados de tanta desinformación. Todo esto llega en un momento complejo para la industria europea, presionada por la competencia china, el encarecimiento de materias primas y los retos de la transición hacia el vehículo eléctrico. La compañía alemana ya ha anunciado 35.000 despidos para finales de la década, algo que se enfoca dentro de su plan de reestructuración a largo plazo.
Aun así, el grupo insiste en que su situación financiera sigue siendo sólida y que continúa comprometido con la innovación y la sostenibilidad. “Seguimos trabajando para garantizar la rentabilidad y la competitividad de Volkswagen en el futuro”, concluye el comunicado.