En la víspera de una nueva edición de las legendarias 24 Horas de Le Mans, Porsche ha vuelto a hacer historia. La marca de Stuttgart ha presentado el Porsche 963 RSP, un prototipo de competición adaptado para circular por carretera. Este vehículo, desarrollado con la colaboración de Porsche Penske Motorsport y concebido como una oda al icónico Porsche 917 del conde Rossi, fusiona herencia, innovación y pasión por la velocidad.
Un homenaje rodante: del 917 al 963 RSP
La historia del Porsche 963 RSP no puede entenderse sin volver al 28 de abril de 1975, cuando un Porsche 917 especialmente modificado recorrió las carreteras de Zuffenhausen a París. Este modelo, propiedad del aristócrata y entusiasta del motor conde Rossi, fue adaptado para su uso en vías públicas y desde entonces se ha convertido en una leyenda viviente.
Cincuenta años después, esa misma inspiración resurge en el 963 RSP, cuyo nombre —RSP— rinde homenaje al propio Roger Penske, figura clave del automovilismo y fundador de Penske Corporation. Este coche, al igual que su antecesor, ha sido modificado “lo justo” para poder circular por carretera sin perder su esencia de prototipo de resistencia.
“Todo comenzó con un ‘¿Y si…?’. El objetivo era construir algo fiel al espíritu del 917. Un coche de competición puro, pero legal para carretera”, explica Timo Resch, CEO de Porsche Cars Norteamérica.
Un diseño que respira herencia y precisión
El Porsche 963 RSP impacta. Su carrocería de fibra de carbono y Kevlar, pintada —no vinilada— en un elegante Martini Silver, representa un desafío técnico digno de la historia que encarna. Su pintura, aplicada a una superficie pensada para la pista, necesitó de técnicas artesanales para lograr una apariencia impecable.
Los detalles rinden homenaje al 917: desde las rejillas de ventilación personalizadas hasta el escudo esmaltado de Porsche en el frontal. Las llantas OZ Racing de 18 pulgadas, calzadas con neumáticos Michelin de lluvia con tipografía vintage, completan la imagen retrofuturista de este vehículo único.
Un interior más humano para un coche radical
A diferencia del 963 de competición, el RSP apuesta por el confort sin traicionar su espíritu. En el habitáculo, dominan el cuero marrón claro y la Alcantara, materiales elegidos en consonancia con el 917 del conde Rossi. El asiento monoplaza de carbono, climatizado y tapizado con mimo, es una joya de ergonomía.
El volante forrado en cuero conserva las funciones propias de un coche de carreras, mientras que los detalles como un portavasos impreso en 3D o un soporte para auriculares muestran la atención al detalle que caracteriza este proyecto.
Corazón híbrido, alma de competición
En su núcleo, el Porsche 963 RSP monta un motor V8 biturbo de 4.6 litros derivado del RS Spyder, capaz de generar unos 680 CV. Esta unidad, utilizada también en el 918 Spyder, se combina con un sistema híbrido de alto rendimiento con componentes de Bosch y Williams Advanced Engineering. El sistema MGU, clave en la recuperación de energía y la entrega de potencia, ha sido adaptado electrónicamente para permitir su uso en carretera.
Pese a su origen puramente de competición, el motor ha sido recalibrado para utilizar combustible convencional y alcanzar un equilibrio perfecto entre rendimiento y legalidad en carretera.
Una experiencia sin precedentes
Aunque no está homologado para producción ni para uso diario, el 963 RSP cuenta con autorización especial en Francia y matrícula ‘W’, lo que le permite circular bajo ciertas condiciones. Tras su paso por Le Mans, será exhibido en el Museo Porsche de Stuttgart, y en julio podrá verse junto al 917 original en el Festival de la Velocidad de Goodwood.
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