Un ‘Crash Test‘ es un proceso complejo por el que un vehículo es sometido a una serie de pruebas para simular diferentes choques que podrán suceder en la vida real. Así, los vídeos que recogen estos momentos tan duros son muchas veces compartidos por las marcas para enseñarnos lo seguros que son sus coches, algo que en un pasado ya hizo Tesla con el Model X o Pagani con el Huayra. El problema viene cuando en estas imágenes podemos ver a la perfección y con todo de detalles cómo destrozan un superdeportivo de ensueño.
Ahora Koenigsegg con motivo de haber alcanzado el millón de seguidores en su cuenta de Instagram acaba de publicar un vídeo en el que podemos ver el Regera pasando por todo tipo de pruebas de choque, pero ya no solo en el típico «laboratorio de pruebas» que acostumbramos a ver en los crash test, sino también en circuito chocando con todo tipo de obstáculos o volando sobre bordillos.
https://instagram.com/p/BdNUUjhDmAF/
Además podemos ver en diferentes partes del vídeo a los ingenieros de la marca sueca dando martillazos alrededor de la carrocería del coche o incluso en los bajos, o cerrando las dos puertas de la forma más brusca posible. Pero dejando de lado nuestras emociones y dolor por este coche hay que entender primero por qué están difícil realizar un crash test con un vehículo como este, en primer lugar porque su precio asciende hasta los 1,8 millones de euros, lo que supone un importante desembolso para la marca. Pero además hay que tener en cuenta que se trata un modelo de producción limitada, es decir, solo existen 80 unidades en todo el mundo.
Para contrarrestar todo este dolor solo queda decir que en este vídeo solo se utilizó una única unidad del Regera, pero lo «mejor» de todo es que el chasis no resultó dañado en ninguna de las pruebas por lo que los ingenieros de la marca podrán reconstruirlo gracias a la resistente estructura del conjunto.
Cristhian Guasp
Jaz Cardozo
Adrià Bbaggés aixo fa mal noi!!!