Este pasado domingo 12, la marca de los cuatro aros consiguió su décima victoria en las 24 horas de Le Mans con su Audi R18 TDI y sus tres magníficos pilotos Fässler, Lotterer y Tréluyer, sin los cuales no habría sido posible conseguir el podio.
Pero no todo fue un camino de rosas para el equipo Audi, ya que tuvieron que afrontar diversos accidentes que incapacitaron dos de sus R18 TDI. Afortunadamente McNish y Rockenfeller no sufrieron lesiones en los graves accidentes que vivieron. Uno de los automóviles impactó contra la barrera provocando su vuelco después de rozar con un GT, pero gracias a las medidas de seguridad del vehículo, el piloto pudo salir por su propio pie. En cuanto al otro piloto, también fue tocado por otro GT cuando circulaba a 300 km/h, lo que ocasionó que chocase contra el guarda raíl de la curva de Indianapolis. Quedó más que demostrado que los elementos de seguridad absorbieron por completo el impacto y cumplieron con su función.
Tras este disgusto, no les quedó otra que confiar en el Audi número dos, que como ya podéis ver no les defraudó ni si quiera cuando el equipo Peugeot amenazó duramente con arrebatarle su posición.
Durante las últimas horas del domingo, los cuatro más rápidos se mantenían distanciados por apenas segundos y el liderato cambiaba de manos constantemente, pero el R18 dirigido por Lotterer logró el mejor tiempo con 3 minutos y 25.289 segundos en la vuelta 229, batiendo así el mejor tiempo.
Si os ha sorprendido esto, os quedaréis con la boca abierta cuando sepáis que ni si quiera tuvo que parar en boxes para una parada no programada, únicamente solo tuvieron un pequeño fallo que incluso les hizo rendir el doble. Este inconveniente era que no podían utilizar los 65 litros de capacidad del depósito de combustible, por lo que Lotterer se vio obligado a ganar ventaja a la fuerza para realizar una parada adicional que le permitiese repostar en la fase final de la carrera.
Tras superar este pequeño contratiempo, el piloto ganó siete segundos sobre el Peugeot que le seguía en segundo lugar. Al final fue merecedor de una lluvia de aplausos por parte de sus compañeros de equipo, ya que fue quien cruzó la meta con una ventaja de 13, 420 segundos.
Con esta victoria, la marca alemana se suma, con sudor y esfuerzo, su décima victoria en trece años de participación. ¿La próxima edición será también para ellos?