La actual generación del Audi TT acaba de recibir el primer lavado de cara más o menos importante en el que se introducen mejoras en el equipamiento, mecánicas, detalles de acabado y se modifica ligeramente el aspecto para conseguir un conjunto más actual.
En el exterior todos los TT tendrán a partir de ahora una imagen algo más deportiva gracias a los nuevos paragolpes de diseño agresivo, llantas de aleación de 17 pulgadas como mínimo, parrilla frontal tridimensional «Singleframe» o la curiosa tapa del deposito de combustible.
Para conseguir un modelo más apetecible, todos los TT contarán de serie con la instrumentación digital configurable, climatizador automático, sistema multimedia integrado, bluetooth, USB, sensor de lluvia, encendido automático de luces, selector de modos de conducción, ordenador, control de crucero y espejos térmicos.
La oferta de motores anunciada parece renunciar al diésel vendido hasta la fecha, dejando a los TFSI de gasolina con varias potencias todo el protagonismo. Según la opción elegida podrán tener cambio manual de seis velocidades o bien una nueva caja de doble embrague con siete velocidades.
Los interesados en el TT podrán elegir la carrocería coupé con cuatro plazas o bien el roadster con techo de lona y solo dos asientos. Los precios recomendados arrancan en los 39.550 € para el cerrado y en los 43.270 € para el segundo.