En el recién celebrado Salón del Automóvil de Ginebra, Lancia mostró la versión definitiva para Europa de su nuevo Flavia Cabrio, un modelo anunciado como sedán pero que, al contrario de lo normal, primero lo veremos con carrocería descapotable. Además, como se puede apreciar, no tiene más de italiano que el logotipo, pues se trata del nuevo Chrysler 200 Convertible, producto de la fusión entre norteamericanos y transalpinos. Pese a ello, no deja de ser elegante por tener genética estadounidense.
Para el tipo de carrocería, su precio y su potencia; es un coche bastante grande, en algunos aspectos eso es bueno y en otros no tanto. Es el sustituto natural del antiguo Sebring, con dimensiones similares a éste. Mide 4,9 metros de longitud y 1,8 de anchura, lo cual permite que cuatro pasajeros adultos viajen con más comodidad de la habitual en un descapotable (que no es mucha), además, el techo es de lona y ocupa menos espacio para cuando queramos lucir coche; pese a ello, su maletero no es grande, con 377 litros con techo y 177 sin él.
En el mercado actual no tiene rival con su precio, el cual no ha sido desvelado, pero guiándonos por su antecesor, el Sebring, seguramente no llegue a 30.000 euros. Solamente habrá una opción de motor: un cuatro cilindros de 2,4 litros y 175 caballos de potencia con caja de cambios automática de 6 velocidades, una combinación más propia del mercado americano, pero que en Europa pierde competitividad y su peso le puede lastrar aún más en cuanto a consumos.
En cuanto a equipamiento, viene realmente completo. De serie lleva asientos de cuero eléctricos y calefactables, llantas de aleación de 18 pulgadas, un potente equipo de sonido Boston Acoustics, arranque sin llave y todos los elementos de seguridad que se pueden pedir a un coche de hoy en día.
