Lancia regresa al Salón de Ginebra con un stand repleto de encanto y elegancia que resaltan la nueva dinastía de automóviles que reúnen lo mejor de dos culturas industriales: la exuberancia del estilo, el saber hacer para lograr una experiencia libre de estrés y la funcionalidad propias de la marca Chrysler además del buen gusto, la innovación y el amor por la artesanía que desde siempre distinguen a Lancia.
Y es precisamente el tema de las «dos almas», implícitas en la unión entre Lancia y Chrysler, el concepto alrededor del cual se articula el área de exposición, dando vida a un movimiento sinuoso de formas y lenguajes expresivos. Así pues, un ambiente sugerente que permite al público descubrir una de las gamas más amplias del escenario internacional que va del segmento B (Ypsilon), pasando por los vehículos de tamaño medio (Delta), hasta llegar al buque insignia (Thema), a los grandes MPV (Voyager) y a los fascinantes descapotables del segmento D (Flavia).

En el stand, el público podrá admirar un Delta S by MOMODESIGN 1.9 Twinturbo MultiJet de 190 CV, caracterizado por la nueva pintura bicolor Gris Antracita con techo Negro Eclipse. El flamante propulsor con el que está equipado le permite alcanzar una velocidad punta de 222 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 7,9 segundos. También podrá admirarse en el stand un Ypsilon S MOMODESIGN equipado con el 1.2 Fire EVO II de 69 CV y que se distingue por una exclusiva carrocería en dos colores Azul Zafiro y Negro Mate.

En la actualidad, el elefantino regresa al nuevo Ypsilon 5 puertas volviendo accesible este modelo de éxito incluso a la clientela más joven. Un coche que permite distinguirse por su línea y su personalidad únicas

Para el Lancia Voyager, en Ginebra, además del nuevo color ‘Maximum Steel Metallic’ debuta la motorización 2.8 turbodiésel common-rail en la variante inédita de 178 CV (131 kW) que, combinada con un cambio automático de seis velocidades, permite que el Voyager alcance los 193 km/h de velocidad máxima y acelere de 0 a 100 km/h en 11,5 segundos. Todo ello con consumos que, en el ciclo mixto de homologación, se reducen a 7,9 l/100 km y 207 g/km de emisiones de CO2.
También se da espacio al Lancia Flavia que se confirma como la quintaesencia del placer de conducción al aire libre con 4 auténticas plazas. Con el propulsor de gasolina de 2,4 litros de 170 CV y el cambio automático de 6 velocidades. Junto a éste desfila un ejemplar de Lancia Thema Platinum de color gris “Granite Crystal”, el primer buque insignia.
Fuente: Lancia
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