El nuevo Pagani Imola Roadster es un hipercoche con un temperamento totalmente de carreras que encarna la máxima expresión de la tecnología de Pagani Automobili. Como su hermano coupé, recibe el nombre de la pista de carreras en la que ha sido modelado y ajustado. Habrá solo ocho ejemplares y todos ellos se basarán en el legado de algunos de slos Pagani de más alto rendimiento.
Con su carrocería reelaborada con respecto al coupé, el Pagani Imola Roadster es un laboratorio donde se han ideado, probado y desarrollado importantes innovaciones. En sus entrañas encontramos un chasis hecho de Carbo-Titanium HP62-G2 y Carbo-Triax HP62. Se complementa con una pintura Acquarello Light que reduce el peso en 5 kg adicionales. En total, pesa solo 1.260 kg.
No menos llamativo que el exterior es el habitáculo. El Pagani Imola Roadster busca deleitar a los conductores con detalles en madera de carbono, cuero de alta calidad y detalles intrincados que muestran la naturaleza mecánica del vehículo. Llaman la atención los altavoces del equipo de audio ubicados sobre los asientos. El precio es una incógnita, pero supera los 5 millones de euros más impuestos.
Una puesta a punto única
La tecnología aerodinámica detrás del modelo es evidente en tres de sus características clave. El esquema general, la aerodinámica interna y los detalles aerodinámicos externos, como las aletas, los alerones, cuatro nuevos flaps y varios deflectores. Por su parte, la suspensión inteligente ayuda a reducir las caídas y los balanceos para ofrecer un rendimiento similar a la competición.
El Pagani Imola Roadster utiliza el sistema de aerodinámica activa introducido por el Huayra Roadster BC, el primer vehículo de carretera en equiparse con esta tecnología. Esto significa que cada uno de los cuatro winglets móviles se comportan de acuerdo con las circunstancias de conducción de una manera dinámica e inmediata. Se ha mejorado también la refrigeración.
Las novedades en este sentido pasan por unas tomas de aire frontales ampliadas, junto a nuevas salidas del aire caliente ocultas en los pasos de rueda y el lateral del paragolpes. Adicionalmente, las novedades contribuyen al rendimiento aerodinámico. Concretamente, las salidas de los pasos de rueda ayudan a reducir la presión debajo de la parte delantera.
Con ello aumentan la estabilidad y envían el flujo de aire a los elementos aerodinámicos traseros. De manera similar, las nuevas luces traseras con ventilaciones extraen el calor de los pasos de rueda traseros, enfriando los frenos y generando carga aerodinámica sobre las ruedas para lograr un mayor agarre. Pone la guinda del pastel la enorme toma de aire ubicada sobre el habitáculo.
Esta alimenta de aire al motor y ha sido diseñada para funcionar en combinación con el alerón de proporciones bíblicas. El objetivo es estabilizar el vehículo a alta velocidad. Pagani señala que cada línea del automóvil ha sido diseñada con el objetivo de proporcionar a los conductores 600 kg de carga aerodinámica a 280 km/h. Puede generar hasta 2,2 g de fuerza lateral y 2,2 g de fuerza de frenado.
La mecánica del Pagani Imola Roadster
Een el vano motor del Imola Roadster descansa el conocido bloque V12 de 6.0 litros de Mercedes-AMG. Este ha sido optimizado para desarrollar 850 CV (625 kW) de potencia y 1.100 Nm de par máximo. Va asociado a una transmisión secuencial Xtrac de siete velocidades ajustada por Pagani, permitiendo una velocidad máxima de 350 km/h.
Y a fin de frenar semejante bestia con total seguridad, el innovador sistema de frenado desarrollado por Brembo se ha optimizado, mediante un estudio aerodinámico intensivo e innumerables pruebas dedicadas, para mejorar aún más todo el sistema de enfriamiento.