Ya os comentamos hace unos meses que Aston Martin montará los V8 de Mercedes-Benz AMG en sus deportivos y ahora el CEO de Aston Martin, Dr Ulrich Bez ha puesto de manifiesto su deseo de tener acceso a las plataformas de Mercedes.
Con un acuerdo que se firmará antes de final de año, la compañía alemana suministrará al fabricante británico componentes para la fabricación de motores.
Pese a que el acuerdo de la empresa con Daimler sólo cubre los componentes eléctricos y los motores V8, Ulrich Bez dice que la asociación tiene «mucho potencial» pero que el V12 de la marca será intocable.
Pese a que el CEO de Aston Martin no ha revelado muchos detalles de sus intenciones creemos que la marca británica estaría interesada en la plataforma de la Clase M de última generación para lanzar SUV en 2017, el Lagonda.
Pese a que la pureza y el diseño serán británicos está claro que el fabricante tendrá una clara influencia germana que por el momento, si lo de las plataformas no sale adelante se restringirá al corazón con los V8 AMG.
¿Por qué creemos que la plataforma reclamada será la del clase M?
La llegada de la Clase M a finales de los años 90 comenzó el camino de una revolución cuyas bases se asentaron con la llegada del BMW X5 y el Cayenne tiempo después, abriendo la veda en un segmento cada vez más en auge.
Aston Martin aún no está en el mercado y está perdiendo clientes ya que marcas como Maserati o Rolls Royce ya tienen proyectados modelos SUV y otras como Porsche llevan años en el mercado contabilizando éxitos.
Hace ya algún tiempo que se filtraron a los medios las primeras informaciones de la intención de la marca de ofrecer su alternativa todocamino, algo que con el Lagonda Concept Car 2009 quedó patente, y que ahora parece estar en la mesa de trabajo de nuevo.