Si la anterior generación del Volvo S60 hacía gala de un llamativo diseño, el nuevo modelo no podía ser menos, heredando el atractivo ADN de su hermano mayor, el Volvo S90. La firma sueca está viviendo una auténtica revolución en términos de diseño y buena prueba de ello es el nuevo Volvo S60 presentado la semana pasada en los Estados Unidos.
Recordemos que será el primer turismo de la marca en producirse al otro lado del atlántico y que no podrá adquirirse con mecánica diésel, un tipo de combustible que poco a poco la firma sueca irá abandonando. Si bien en una buena parte del mundo esto no supondrá un problema, en lugares como Europa podría suponer una reducción importante en las ventas.
Si bien es cierto que estéticamente el nuevo S60 no rompe moldes, luciendo una imagen fresca, atractiva, elegante y dinámica, este sigue muy fiel los trazos ya vistos en el también nuevo Volvo V60 y quizás por eso no nos sorprende. En cualquier caso, los cambios sí que son importantes respecto a su predecesor, y es por ello que hoy os traigo una nueva comparativa visual entre ambos modelos, a fin de que juzguéis por vosotros mismos cuánto ha cambiado la berlina.
En el interior ocurre algo parecido y toma muchos elementos del V60, incluida la elevada sensación de calidad. Según el nivel de terminación podrán tener mucho equipamiento, destacando los equipos multimedia de última generación, la instrumentación configurable, el freno de mano eléctrico o el acceso a Internet.