Se acabo la primera parte de la gira asiática, y el circo de la Formula 1 aterriza en Europa. Durante estas semanas de espera, los equipos han estado poniendo a punto sus evoluciones, en los entrenamientos que se realizaron en Mugello. Durante los 4 días de pruebas se han visto diferentes novedades, un morro nuevo en McLaren, nuevos escapes para Ferrari… todas estas evoluciones se verán ya en Barcelona.
La temporada Europea levanta el telón, con el Gran Premio de España. Un circuito muy conocido por los todos los equipos debido a la realización de las pruebas de pretemporada. El circuito de Montmeló es unos de los más completos de la temporada, consta de 16 curvas, 9 a izquierdas y 7 a derechas. Darán 66 vueltas al circuito catalán recorriendo un total de 307, 23 km.
La recta de meta de más de 1 km de longitud, exigirá mucho a los motores. Será ahí donde se sitúe la activación del DRS. El paso por boxes penaliza bastante, se tarda sobre 20 s en recorrer la línea de garajes, a lo que hay que sumar el tiempo de la parada.
En esta carrera prima más, el equilibrio del coche, que la calidad del piloto. Deben buscar una buena configuración aerodinámica para trazar bien las curvas, en las que se necesita mucho apoyo. Pero a su vez la recta principal es de alta velocidad con lo cual los ingenieros tendrán que trabajar mucho este Fin de semana.
Los monoplazas sufrirán un alto desgaste de neumáticos y de frenos. Si de por sí este año las carreras están siendo muy entretenidas e interesantes, la carrera de este fin de semana aún más. A lo anteriormente dicho de las características de este circuito hay que saber si todas las evoluciones que traigan los equipos funcionan y ver si todo sigue igual o hay cambios considerables.
Un artículo de Gonzalo Torres