Hace unos minutos, Porsche ha anunciado que la Federación Internacional del Automóvil (FIA) ha aceptado su solicitud como constructor de Fórmula E. Esto significa que el equipo puede continuar con el desarrollo de su propio grupo propulsor eléctrico, que será homologado en 2019.
Tal y como ya os comenté el pasado verano, la marca alemana tiene prevista su participación en la sexta temporada de este campeonato eléctrico que se inicia a finales de 2019.
El responsable del proyecto será el mismo que en su momento estuvo a cargo del Prototipo 919 Hybrid. Andreas Seidl será el responsable del desarrollo técnico y de la ejecución del Programa de Fórmula E y el modelo Gen2 de Fórmula E irá tomando forma de forma oficial.
El organizador de la Fórmula E proporciona el chasis y la batería. Sin embargo, todos los componentes del sistema de propulsión están desarrollados por los propios competidores, algo que pone muy interesante la competición.
Las claves que darán la victoria serán el motor eléctrico, el inversor, el sistema de frenos por cable, la transmisión, el diferencial, los ejes, el monocasco y los componentes de la suspensión unidos al eje trasero, así como el sistema de refrigeración y la ECU. La eficiencia energética del grupo propulsor no sólo juega un papel decisivo en una competición sino que también es fundamental para el desarrollo de los vehículos eléctricos de carretera.
La entrada de Porsche en la Fórmula E en 2019 coincidirá con el lanzamiento al mercado de la versión de producción en serie del prototipo Mission E que será el primer Porsche completamente eléctrico.