¿Estamos preparados para correr?

El cumplimiento de los límites de velocidad sigue siendo una de las asignaturas pendientes de la seguridad vial en nuestro país y la verdad es que ni la mayor parte de la red viaria ni el “excelente” parque móvil que nos está dejando la dura crisis económica, están para velocidades elevadas.

Nos empeñemos o no, generalizar un aumento de velocidad y que haya barra libre para todos en cuanto al tema de rebasar unos km/h el actual límite de velocidad, no suena mal pero desde mi punto de vista, en general, no estamos preparados.

¿Dejamos correr al trabajador que por desgracia está forzado a circular con su familia en un coche con más de 14 años? Pues va a ser que no. ¿Dejamos pues correr a los que tienen un coche nuevo? Pues como que tampoco.

Soy consciente de que la mayoría de los radares están ubicados con fines recaudatorios, algo que a día de hoy, no sé cómo es utilizado por las autoridades como escudo, alegando que están ahí por nuestra seguridad. Pues mire usted, va a ser que no.

Un servidor ha tenido la oportunidad de circular por muchos países de la Unión Europea y la verdad es que ni su red viaria es tan buena como pensamos ni la nuestra tan espantosa como la pintamos y más teniendo en cuenta que aquí son gratis y en otros países “se asalta” a los conductores con el denominado peaje.

Entonces, ¿estamos preparados para correr?, ¿dónde ponemos el límite?, ¿están nuestras carreteras todo lo bien que deberían?, ¿estamos seguros de que si lo subimos, no habrá determinados pícaros que vuelvan a saltárselo levemente?

Si, habéis leído bien, levemente. Un alto porcentaje de las denuncias hacen referencia a excesos de velocidad castigados con 100 euros de multa (50 euros por pronto pago).

¿50 euros?, pues casi que corro, ¿no?, total…

Según  el artículo 65 de la Ley de Seguridad vial, circular a una velocidad superior a la permitida supone cometer una infracción grave o muy grave. ¿Grave? ¿Y sólo nos imponen 100 euros?, igual es que ni es tan grave, ni tan peligroso como lo pintan, ¿o sí?.

Curiosamente en la última campaña de control de velocidad que se llevó a cabo (entre el 31 de marzo y el 6 de abril) por la DGT, en 7 días fueron denunciados 30.486 conductores de los 921.375 controlados. Esto supone un 3,4 %, dato que me parece bastante insignificante.