La octava generación del Volkswagen Golf ya es una realidad. Si bien el modelo se presenta en el mercado muy mejorado en lo que a equipamiento y tecnología se refiere, en su exterior luce un diseño bastante continuista, algo que sin lugar a duda le costará numerosas críticas. Sí que es verdad que se ha hecho aún más anguloso, musculoso y cuenta con novedades propias del actual diseño de la marca.
También se ha mejorado sutilmente la aerodinámica, al tiempo que se han modificado las dimensiones. El nuevo Golf es ligeramente más largo, un poco menos ancho y algo más bajo que el modelo que encontramos actualmente en el mercado. También encontramos un interior mucho más moderno con multitud de instrumentos digitales.
El «Digital Cockpit» destaca por la pantalla de 10.25 pulgadas para la instrumentación, un sistema de infotainment con pantalla táctil de 8,25 pulgadas con conexión on line y un volante multifunción. A primera vista los materiales no parecen mejorar en exceso, aunque teóricamente deberían hacerlo. También crecerá sensiblemente la habitabilidad.
Para que puedas juzgar por ti mismo cuánto ha cambiado este compacto que llegará al mercado el próximo mes de diciembre, te proponemos una de nuestras clásicas comparativas visuales con su predecesor. Una vez se produzca el lanzamiento, conoceremos los resultados de la acogida en el mercado, que no debería ser mala tras 45 años de éxitos.