El mundo de las subastas es apasionante, y lo mismo podemos encontrar desde un E-type que fue conducido por el mismísimo Stirling Moss o el Lamborghini Huracán que le fue regalado al Papa Francisco. Ahora tenemos ante nosotros una joya para aquellos que buscan algo con más personalidad, un camión de bomberos de 1927 modelo «Ahrens Fox N-S-4». La ‘Ahrens-Fox Fire Engine Company’ era una empresa de gran prestigio encargada de fabricar los camiones de bomberos más robustos y fiables de los Estados Unidos.
Los Ahrens-Fox se caracterizaban por ser vehículos muy duros, y que en muchas ocasiones tenían que aguantar muchos años de servicio, algunos incluso superaban las tres décadas de uso. Además destacaban por sus acabados y la alta atención al detalle que llevó a muchos a compararlos con Rolls-Royce, solo que en el frontal en vez de portar «El Espíritu del Éxtasis» equipaba una bomba de agua de gran tamaño…
El Ahrens Fox N-S-4 tenía una potencia de 110 caballos, aunque sería más correcto hablar en presente, ya que esta unidad se encuentra en un estado impecable y su motor sigue funcionando a la perfección como se puede ver en un vídeo. Además tiene la capacidad de bombear más 4.000 litros de agua por minuto, y así apagar cualquier fuego que se nos ponga por delante. Su pintura exterior ha sido restaurada para devolverlo a su estado original, además el puesto de conducción también ha recibido una actualización de lo más completa .
John P. Ahrens y Charles H Fox construyeron en Cincinnati (Ohio) su primer camión de bomberos en 1911, justo cuando comenzaron a aparecer los primeros vehículos de propulsión. Además, a diferencia de la sociedad del momento, los bomberos se adaptaron rápidamente a los vehículos de propulsión, y enseguida consiguieron incorporarlos a su dinámica de trabajo para llevar a cabo un servicio más eficaz y rápido. Con el paso de los años, la mayoría de los camiones de bomberos de Ahrens Fox acabaron desapareciendo, lo que hace que este ejemplar aumente considerablemente su valor.