La carrera por el coche autónomo ha dado un paso muy importante gracias a Bosch y la compañía holandesa de mapas digitales TomTom. Hasta ahora la recogida de datos para los coches autónomos se ha realizado mediante datos procedentes de señales de vídeo, lo que esconde una serie de desventajas importantes, pero gracias a estas dos empresas se ha desarrollado el denominado «Radar Road Signature«. ¿Qué es esto? Pues una forma de recogida de datos que mediante señales de radar permite a un coche autónomo ubicarse de forma exacta en su entorno.
Mientras que la recogida de datos por señales de vídeo encuentra sus principales inconvenientes en condiciones de baja luz o de climatología adversa el nuevo «Radar Road Signature» sale ganando con ventaja en cualquier tipo de situación. Además este transmite a la nube tan solo cinco kilobytes de datos por kilómetro, una cifra mucho menor que el sistema tradicional, el cual requiere hasta dos veces más volumen de datos para conformar sus datos mediante señales de vídeo.
Este nuevo sistema también destaca por su exactitud, se compone mediante miles de millones de puntos de imagen individuales que van dando forma al entorno por el que circulamos a medida que las señales de radar van rebotando en los diferentes elementos de la vía, ya sea un guardarrail o en las señales de tráfico. Esto nos permite crear una fiel reproducción del trazado de la carretera y una ubicación con una precisión de escasos centímetros.
«El Radar Road Signature es un hito en el camino hacia la conducción autónoma. Permitirá que los vehículos autónomos determinen de manera fiable su ubicación exacta en todo momento » declaraba el CEO de Bosch -Dr. Dirk Hoheisel-.
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