Adrian Mardell, CEO de la compañía desde 2022, anunció que abandonaba la empresa tras más de 30 años. El anuncio llega en un contexto delicado para la marca: las ventas de Jaguar han caído un 97% en Europa, generando dudas sobre el rumbo de la emblemática marca británica.
Jaguar: del desplome comercial a la reinvención total
Según datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), Jaguar experimentó una caída del 97,5% en ventas en abril de 2025, seguida por una disminución del 93,6% en mayo. A nivel global, la contracción acumulada es del 77,8% respecto a 2024.
Aunque las cifras pueden parecer alarmantes, detrás de ellas supuestamente había una estrategia que Mardell defendió como necesaria: una reinvención radical hacia un futuro 100% eléctrico y de lujo. Jaguar detuvo deliberadamente la producción a finales de 2024, dejando concesionarios sin stock y paralizando su oferta tradicional para preparar su relanzamiento.
Una estrategia de alto riesgo: ¿audacia o error?
Esta pausa no fue un accidente ni el resultado de una crisis operativa. Durante el Investor Day 2025, la compañía dejó claro que su objetivo es competir directamente con marcas de lujo más exclusivas. Entre los indicadores positivos presentados:
- Aumento del 110% en tráfico web durante noviembre y diciembre de 2024.
- Un 20% más de consumidores consideran ahora a Jaguar una marca por la que vale la pena pagar más.
- Un 23% de incremento en familiaridad de marca gracias a su nueva campaña global, que si bien ha sido criticada por su enfoque excesivamente «woke», generó conversación e impacto mediático.
Sin embargo, esta transformación drástica también ha traído consecuencias: clientes tradicionales decepcionados, ventas en picado y una incertidumbre generalizada sobre si Jaguar podrá cumplir sus promesas cuando lance su nueva gama en 2026.
La gestión de Mardell: éxito financiero pero con legado incierto
Adrian Mardell no solo lideró esta controvertida estrategia en Jaguar. Bajo su mandato, JLR en conjunto logró:
- El mayor beneficio en una década.
- Reducción de deuda por 5.000 millones de libras.
- El mejor resultado operativo de su historia reciente.
A pesar del éxito financiero global, el futuro de Jaguar —una marca con fuerte carga simbólica para el Reino Unido— queda envuelto en incógnitas. Su salida, en este momento crítico, plantea la pregunta: ¿Es el momento adecuado para cambiar de liderazgo?
Impacto global: tensiones con EE. UU. y nuevos desafíos
En abril de este año, JLR también tuvo que suspender temporalmente las exportaciones a Estados Unidos por un arancel del 25% impuesto por el presidente Donald Trump a vehículos importados. Aunque las exportaciones se reanudaron en mayo, este tipo de disrupciones añaden presión a un contexto ya volátil.
El mercado estadounidense representa cerca del 25% de las ventas globales de JLR, siendo clave para modelos de alta gama como Range Rover y Defender. La falta de una base productiva en EE. UU. y los crecientes costos logísticos podrían afectar las metas a corto plazo de la compañía.