Con 20.8 km de longitud total, 300 metros de cambio de altitud, 73 curvas (33 a la izquierda y 40 a la derecha), y un pico de altura de 617 metros de altura sobre el nivel del mar, este trazado es un auténtico centro de pruebas.
Para que os hagáis una idea del ritmo al que se circula y de las condiciones a las que se enfrentan los probadores allí, 1 km en el Infierno Verde, equivale a 18 km de uso en la vida diaria dado que el 10% de los test se hacen en condiciones húmedas y las vueltas al circuito se efectúan al 90% de la capacidad del vehículo.
Además de haberse convertido en un auténtico centro de pruebas y métricas, el Infierno Verde es una de las “Mecas” del automovilismo por excelencia. Hoy nos hemos topado con un interesante tutorial de BridgeToGantry que nos explica cómo afrontar Nürburgring con el asfalto mojado en un vehículo con tracción delantera y sin morir en el intento.
Aaron Onrubia Santos
Yo en gran turismo en el mismo circuito adelante de muchas maneras
To loko premo
Diego Dimanuel Iglesias ya lo saens