Durante el pasado mes de julio Skoda logró comercializar en todo el mundo más de cien mil unidades, una cifra récord jamás alcanzada. Si bien el crecimiento respecto al mismo mes de 2018 no fue muy elevado, superar esa barrera supone un hito importante para el fabricante checo.
En concreto Skoda ha comunicado que entregó en julio 102.700 vehículos a los clientes, una cifra que representa una subida del 3,2% en comparación con el mismo mes del año anterior. Uno de los mayores aumentos se ha dado en Europa Occidental, con un 12,3% de incremento y un total de 40.600 unidades.
Si hablamos de los resultados por países, a Skoda le fue muy bien en julio en mercados como el ruso (7.300 unidades), en la República Checa (8.000 unidades), Alemania (16.000 unidades), Polonia (5.300 uds) y Francia (3.000 uds). Registró caídas importantes en China (-15,7% hasta un total de 21.100 unidades) y en la India (-14,6% y 1.100 unidades).
Por modelos el Octavia fue el preferido del público con 28.800 unidades vendidas, seguido de los Kodiaq (15.400 unidades) y el pequeño Fabia (15.200 uds). Los Skoda Karoq (13.700 unidades) y Kamiq (3.900 unidades) también mejoraron sus datos mientras que Rapid, Superb y Citigo registraron números negativos.