En Europa Occidental el Skoda Rapid ha pasado a mejor vida y con el Scala jugando en pleno segmento C, la berlina pequeña ha dejado de ofertarse. En otros mercados sin embargo sigue siendo un producto muy interesante y por eso la marca ha optado por presentar un lavado de cara.
Si bien la base se mantiene invariada, el renovado Rapid cuenta con un frontal inspirado en los últimos lanzamientos de la marca (recuerda mucho al Scala) mientras que en la zaga también se han añadido unos pilotos con formas inconfundiblemente Skoda.
En el interior la revisión ha sido más ligera pero también se agradece, aumentando la sensación de calidad gracias a los nuevos materiales utilizados para recubrir las puertas, los nuevos tapizados, etc. Los sistemas multimedia son de última generación y con la máxima conectividad, tienen hasta ocho pulgadas y ahora su formato es tipo tablet.
Otra novedad importante en el interior es la instrumentación digital configurable, opcional en algunos acabados. El volante multifunción también se pone al día y además de ser más moderno, puede ser calefactable (esta función igualmente se ofrece para los asientos delanteros y traseros como opción).
Entre la dotación disponible hay que mencionar las ópticas LED, techo solar deslizante, tapizado mixto, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, Front Assist, acceso sin llave, arranque por botón, varios puertos USB para recarga de elementos electrónicos, etc.
La gama de motores anunciada para Rusia está formada por dos bloques de gasolina. El primero es el 1.6 MPI en variantes con 90 con caja manual de cinco velocidades y 110 CV con cambio manual o automático con seis relaciones, siendo el tope de gama el 1.4 TSI con 125 CV y transmisión DSG.