Skoda está celebrando en estos días la fabricación de la unidad 20 millones desde que iniciase su actividad como productor de automóviles allá por 1905. Durante estos años la firma ha vivido etapas muy diversas e incluso fue considerada como un fabricante de automóviles de lujo en los tiempos de la post-guerra.
A pesar de llevar muchos años vendiendo sus modelos, no fue hasta la entrada de Volkswagen en el capital de la firma cuando verdaderamente cambiaron las cosas para Skoda. Desde 1991 la empresa evolucionó rápidamente y la incorporación de la tecnología alemana le ha servido para situarse como una empresa de buena imagen, actual y avanzada.
La unidad 20 millones corresponde a un Skoda Karoq de color blanco que ha salido de la planta checa situada en Kvasiny. Los modelos de la marca también se producen o ensamblan en otras 14 plantas alrededor del mundo, destacando China, India, Rusia o la nueva de ensamblaje en Argelia.
La gama de Skoda ha ido creciendo con los años y actualmente cubre la mayor parte del mercado, contando con urbanos, polivalentes, compactos, familiares, berlinas medias y diversos SUVs. En los próximos años la marca dará el salto a la hibridación y los eléctricos.