El cuadro de relojes que hay tras el volante ofrece la misma disposición que un Golf VII convencional solo que en esta ocasión las agujas cuentan con el característico azul de los modelos R.
La consola central está empotrada en un salpicadero de material blando, está ligeramente inclinada hacia el conductor y cuenta con un buen acabado que se prolonga por las puertas. La consola se encuentra rematada en nuestra unidad en un acabado plástico lacado llamadoCarbon Touch.
El panel de instrumentos central estaba presidido en nuestra unidad por una gran pantalla táctil de infoentretenimiento de ocho pulgadas del sistema Discover Pro – +1.780 euros – con las teclas del menú ubicadas a ambos lados de la misma. La nueva generación de pantallas táctiles montasensor de proximidad y una función que reacciona al movimiento y e incorpora función capacitiva.
El nuevo sistema de infoentretenimiento Discover Pro es realmente intuitivo y desde el mismo pueden ajustarse infinidad de parámetros del vehículo.
Debajo del módulo de infoentretenimiento se encuentran situados los controles de mando del climatizador bizona.
A continuación, nos topamos con la extensión de la consola que empieza a curvarse en la tapa de un hueco portaobjetos ubicado frente a la palanca de cambios. En este hueco encontramos una superficie gomosa antideslizante ideal para guardar pequeños objetos además de la toma USB del equipo de sonido. La tapa de nuestra unidad montaba el emblema 4MOTION. Además, la bandeja es tan amplia que incluso puede depositarse en ella un Smartphone.
La base de la palanca de cambios está rodeada de botones. A la derecha de la misma nos encontramos con el botón del sistema de sensores de aparcamiento mientras que a la izquierda tendremos el botón de Start Stop, el botón de desconexión del ESC, el botón mode y la desactivación del sistema start and stop.
Botón mode: Una de las novedades del Golf R es la “selección de perfiles de conducción” que se ofrece de serie en combinación con el sistema “DCC”. En total, están disponibles cuatro programas de conducción y, en combinación con el cambio automático “DSG”, cinco programas: “Eco”, “Normal”, “Individual” y, el modo desarrollado especialmente para el Golf R, el modo “Race”. En combinación con el sistema “DCC” está también disponible, adicionalmente, el modo “Comfort”.
Si viajamos hacia el apoyabrazos nos encontraremos con el freno de mano eléctrico y el botón de la función Auto-Hold junto al mechero y a varios compartimentos entre el que destaca el apoyabrazos con compartimento y con regulación en altura y profundidad.
Uno de los detalles característicos de los modelos R son los revestimientos de las puertas que en nuestra unidad venían equipados con una banda luminosa azul que forma parte de la iluminación ambiental.
Las teclas de manejo del elevalunas eléctrico se sitúan en los reposabrazos de las puertas de forma ergonómica y de fácil acceso; delante de la maneta de la puerta del conductor se encuentra situado un regulador para el ajuste eléctrico de los retrovisores.
Los asientos del Golf R ofrecen un alto nivel de confort. Tanto delante, como detrás, las cinco plazas han sido nuevamente realineadas, sin embargo, la plaza central sigue siendo el gran hándicap en este segmento aunque en este caso no está tan mal.
El acceso a las plazas delanteras es sencillo aunque resulta complejo no rozar las sujeciones laterales de los asientos con la espalda al entrar. El acceso a las plazas traseras en el modelo objeto de la prueba es algo más complejo al tratarse de un modelo de tres puertas pero el gran ángulo de abatimiento de los asientos y las grandes dimensiones de las puertas delanteras minimizan la dificultad notablemente. Pese a estar homologado para 5 ocupantes la verdad es que la parte trasera está diseñada para 2 personas.
Motorización Golf R
Bajo el capó del nuevo Golf R nos encontramos un potente motor de cuatro cilindros de la serie EA888, es decir, el mismo que el que equipa el Golf GTI pero perfeccionado y con un turbo de mayor tamaño–Ver prueba Volkswagen Golf GTI-.
Con respecto a la anterior generación se ha aumentado la potencia y el par así como numerosos detalles técnicos del motor de 1.984 cc.
En comparación con el Golf GTI Performance de 169 kW / 230 cv, Volkswagen aumentó la potencia del Golf R a 221 kW / 300 cv disponibles entre las 5.500 y las 6.200 rpm creando así un cuatro cilindros realmente potente. El par máximo de 380 Nm se encuentra disponible desde las 1.800 a las 5.500 rpm. Con estas cifras resulta lógico entender que los 1.574 kg de peso del modelo se mueven con completa soltura (1.476 kg del hatchback). –de 0 a 100 km/h en 5.1 segundos-
Gracias a un nuevo control del refrigerante completamente electrónico, el TSI del Golf R dispone, además, de una gestión térmica mucho más eficiente con una fase de calentamiento más corta que contribuye a reducir las pérdidas por fricción.
Este TSI dispone de una distribución por válvulas variable con regulación doble del árbol de levas. Adicionalmente, la carrera de la válvula en el lado de descarga es conmutable en dos pasos. Gracias a esta solución, el cambio de carga puede controlarse de forma óptima en los ámbitos del rendimiento, el consumo y las emisiones de gases
Todo el poderío de este impresionante TSI retocado por la letra R transmite su potencia al suelo mediante un sistema de tracción total 4MOTION.
Nuestra unidad de la cuarta generación del Golf R equipa ahora un sistema de tracción total 4MOTION de última generación acoplado a una caja de cambios automática de doble embrague y seis velocidades “DSG” que, alternativamente, puede conmutarse también de forma manual a través de la propia palanca de cambios o de las levas ubicadas en el volante.
El sistema de tracción del Golf R emplea un embrague Haldex 5 que se activa antes de que las ruedas patinen evitando, casi por completo, que se produzca una pérdida de tracción.
Con una carga baja o durante el empuje, la propulsión se produce primeramente a través del eje delantero, quedando el eje trasero desacoplado. No obstante, si es necesario, el eje trasero del Golf R se conecta en décimas de segundo. Esto se produce a través del embrague Haldex accionado por una bomba de aceite electrohidráulica.
Mediante la cantidad de presión ejercida sobre las láminas del embrague es posible variar el par transferible sin escalonamientos.
La activación del embrague Haldex se produce en relación al par requerido por el conductor. Al mismo tiempo se evalúan parámetros como las revoluciones de las ruedas y el ángulo de dirección y en caso necesario, existe la posibilidad de transmitir casi el 100% del par al eje trasero.
Adicionalmente, el Golf R monta el sistema electrónico “EDS en las 4 ruedas”. Este sistema integrado en el sistema ESC (control de estabilidad) actúa como lo haría un diferencial transversal, eso sí, salvando las diferencias.
El sistema EDS posibilita una transferencia estable de la fuerza de propulsión a través de la rueda contraria frenando la rueda que patina.
Para frenar las ruedas más cercanas al interior de la curva, cuando abordamos una a alta velocidad, el modelo equipa XDS+. De este modo, el sistema actúa comobloqueo de diferencial equilibrando el subviraje cuando se tomancurvas a gran velocidad.
Con el modelo objeto de la prueba hemos obtenido los siguientes consumos: Entre 8.1 y 8.4 litros a los 100 km en autovías y autopistas, conduciendo a velocidad elevada pero constante. En consumo urbano el consumo obtenido ha rondado entre los 8.9 y los 9.5 litros a los 100 km dependiendo del tráfico. La media combinada de la prueba se ha fijado en 8.6 litros a los 100 km. Si jugamos con el modelo los consumos se dispararán notablemente. De hecho, en Ascari la media estaba en 27 litros a los 100, auqneu claro, no es una referencia…
Como no en Ascari Race Resort….
Ya me crucé un par de veces con el mismo coche esta semana por Malaga…
Muy caro.