Hace unos minutos SEAT y Volkswagen han confirmado que existe un problema técnico que afecta al nuevo Ibiza, al nuevo Arona y al nuevo Polo.
Al parecer, según ambas marcas, existe la posibilidad de que en determinadas situaciones (por ejemplo en un repentino y brusco cambio de carril con cinco pasajeros en el vehículo) y solamente cuando en el asiento trasero las posiciones central e izquierda estén ocupadas al mismo tiempo, el cinturón del lado izquierdo puede desabrocharse inintencionadamente.
Desde las marcas nos han comentado que se ha identificado una solución técnica que evitar que esto ocurra y aunque los modelos anteriormente mencionados están homologados y son seguros para la conducción, se recomienda que no haga uso de la plaza central trasera de ninguno de los modelos hasta que el problema sea resuelto.
El Grupo Alemán está solicitando la validación de esta solución a las autoridades competentes para implementarla lo antes posible tanto en los vehículos ya entregados a clientes como en la producción en serie.
Durante las próximas semanas, se iniciará la campaña de llamada a revisión. Los clientes recibirán una carta para concertar una cita con un servicio oficial. La instalación de los nuevos elementos será totalmente gratuita para los clientes.