La nueva normativa antincontaminación Euro 6d TEMP se está encargando de reducir drásticamente la oferta de motores en muchos automóviles, siendo en algunos casos bastante alarmante. En el caso del Renault Clio, la normativa ha conseguido «cargarse» todas las variantes con cierta chispa.
Salvo que te adelantes al mes de septiembre y adquieras una unidad en stock, la oferta del Clio quedará reducida a los motores 0.9 TCe en variantes con 75 y 90 CV, y al 1.5 dCi de 75 y 90 CV, en este último caso con opción de incluir la caja de cambios de doble embrague con siete velocidades.
Sabiendo esto, quedan fuera de la familia los 1.2i 16v de 75 CV como opción de acceso (aunque aparece una propuesta mejor), el 1.2 TCe de 120 CV con y sin cambio EDC, los 1.5 dCi de 110 CV que no llevaban demasiado tiempo bajo el capó del Clio, y las variantes Renault Sport con 200 y 220 CV de potencia.
Teniendo en cuenta que el nuevo Clio V llegará al mercado el año que viene, parece que la generación actual terminará muriendo con esta reducción mecánica que seguro le costará más de un cliente al no haber alternativas de prestaciones más o menos notables, siendo las mecánicas de 90 CV suficientes pero sin enamorar.