Seguramente recuerdes que David Brabham vuelve a la acción con la mítica firma que lleva su nombre. El fabricante británico nos sorprendió recientemente con el Brabham BT62, y podríamos decir que se convertirá en el nuevo rival de otros superdeportivos como el McLaren Senna o el Aston Martin Vulcan.
Brabham Automotive comienza así una nueva era con un ambicioso plan para volver a la competición. Pero lo más llamativo es que este coche creado y desarrollado de forma independiente para los circuitos de todo el mundo ha hecho su debut dinámico en el Festival de Velocidad de Goodwood, así que ya lo puedes ver y escuchar rugiendo sobre la pista.
El BT62 continúa la leyenda con la denominación ‘BT’ establecida por los fundadores Jack Brabham y Ron Tauranac en la década de los 60′ y honrando así el legado de los coches más míticos de la marca. El nuevo Brabham es un pura raza que impresiona por sus prestaciones y su salvaje exterior, donde la aerodinámica lo es todo. Con una potencia de 710 caballos de potencia y un peso de solo 972 kilogramos se convierte en el arma perfecta para romper más de un récord, gracias a su motor V8 sobrealimentado de 5.4 litros.
Para conseguir un peso tan liviano toda su carrocería se ha construido en carbono, con numerosas tomas de aire y entradas que permiten conseguir un downforce de 1.200 kilogramos.
Qué mejor forma de abrir un nuevo capítulo para esta legendaria firma que con un coche tan espectacular como el BT62, y es que cada línea en su exterior emana radicalidad y deportividad. Incluso su zaga nos podría recordar ligeramente al McLaren Senna GTR, con esas enormes ópticas de LED que recorren toda la parte trasera acompañadas de un prominente alerón de fibra de carbono. Desde su atractivo juego de llantas, hasta las tomas de aire laterales o el enorme difusor trasero, cada pieza se ha cuidado al detalle para la máxima eficiencia aerodinámica en circuito.
En su interior encontramos un aire puramente racing, en parte gracias a ese volante que parece directamente importado de la Fórmula 1 o a su túnel central más minimalista. La combinación de fibra de carbono y Alcántara le da al habitáculo un toque exclusivo, tampoco podían faltar unos grandes asientos bucket y una jaula antivuelco completa para crear uno de los superdeportivos más radicales de hoy en día.
Brabham ha anunciado que solo se fabricarán 70 unidades del BT62 para todo el planeta, y si estabas pensando en hacerte con uno deberías empezar a ahorrar ya que su precio se dispara hasta los 1,15 millones de euros. Las primeras 35 unidades serán un tributo a la historia en la competición de Brabham Automotive, por lo que lucirán los colores clásicos de la firma británica en circuito.
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