Hoy se a sabido que a Bugatti, la marca que ostenta el record de velocidad máxima en un coche de calle, ha hecho un pedido de cajas de cambio para el único Bugatti Veyron que el queda, el Grand Sport. Parace ser que después de terminar la producción de la variante coupé todavía les queda por introducir en el mercado de los millonarios. Estamos hablando de nada menos que 105 vehículos descapotables.
Durante los tres últimos meses la marca franco-italiana no ha conseguido vender ni un solo Veyron. En el 2010 consigueron colocar 40 coches, pero parece ser que la gente ya no está tan interesada como al principio en adquirir uno de los mejores superdeportivos de todos los tiempos.
Por lo que parece, todavía les queda hasta el 2015 para empezar a fabricar el Galiber, una berlina de lujo con un motor central-delantero de 16 cilindros y cuatro turbocompresores.